En cuestión de sexo, todos mienten. Ellos, al decir que siempre tienen ganas, al alardear cuando pasa una chica guapa de que le harían esto y aquello. Ellas, al exagerar en la cama, al hacer pensar a sus compañeros de juegos íntimos que disfrutan mucho aunque en realidad estén pensando en acabar cuanto antes.
Como predica el artículo... la clave es la comunicación. Fanfarronear y fingir son formas de distorsionar información; una pena, porque eso genera un sufrimiento que, para no variar, tampoco se comunica entre parejas.
Luego, las falsas creencias sociales y la influencia de la pornografía (que puede ser buena, y puede ser mala -depende del receptor-) son un factor más que contribuyen a este hecho.
Si las parejas nos sinceráramos los unos con los otros en este aspecto, el resultado sería notablemente mejor que cualquier cosa fanfarroneable/fingible.
#1: Si las parejas nos sinceráramos los unos con los otros en este aspecto, el resultado sería notablemente mejor que cualquier cosa fanfarroneable/fingible.
¿De dónde puede surgir ese ataque de honestidad?
La sociedad no enseña eso. Los medios de comunicación no enseñan eso. El círculo de amigos o la familia no enseñan eso. Y no me atrevo ni a considerar las religiones.
En primer lugar, me atrevería a afirmar que "la Sociedad no enseña eso" no es absolutamente cierto, pues la Sociedad al completo está formada por muchos tipos de sub-sociedades distintas. Hay sectores de la Sociedad donde encontrar estos estímulos y muchos otros; sin embargo hay que querer buscarlos, y saber buscarlos.
Los medios, amigos-familia y religión: no. Estoy 100% de acuerdo contigo.
El sexo, además de físico, tiene un gran componente psicológico. Cuando los miembros de una pareja perciben en sí mismos que algo no va bien (como el que percibe que está decaído, estresado, deprimido o irascente) deben tratar, en primer lugar, de admitirlo. Admitir que algo no va como se desea es el primer paso; el segundo, "idealmente", sería comunicarlo con la pareja, hablar sobre ello sin miedos por el bien común.
Complejo. Influye la educación, la confianza en la pareja, la inteligencia emocional, etc. Si supiera cuál es la solución ideal para que ese "ataque de honestidad" se produjera, escribiría un libro y evitaríamos encuestas de este tipo. Quizá, y con miras al futuro, la solución sea educar a nuestros hijos adecuadamente e inculcarles el valor de la comunicación y el respeto en la pareja.
Porque una pareja es un equipo, un equipo ganador (seguiré soñando mientras pueda).
No entiendo como dicen en el artículo que todos mienten y al final te ponen una puta encuesta sobre satisfacción sexual... ¿no habíamos quedado en que todos mienten? ¿qué credibilidad tiene esa encuesta?
Comentarios
Como predica el artículo... la clave es la comunicación. Fanfarronear y fingir son formas de distorsionar información; una pena, porque eso genera un sufrimiento que, para no variar, tampoco se comunica entre parejas.
Luego, las falsas creencias sociales y la influencia de la pornografía (que puede ser buena, y puede ser mala -depende del receptor-) son un factor más que contribuyen a este hecho.
Si las parejas nos sinceráramos los unos con los otros en este aspecto, el resultado sería notablemente mejor que cualquier cosa fanfarroneable/fingible.
#1: Si las parejas nos sinceráramos los unos con los otros en este aspecto, el resultado sería notablemente mejor que cualquier cosa fanfarroneable/fingible.
¿De dónde puede surgir ese ataque de honestidad?
La sociedad no enseña eso. Los medios de comunicación no enseñan eso. El círculo de amigos o la familia no enseñan eso. Y no me atrevo ni a considerar las religiones.
#2 Difícil pregunta.
En primer lugar, me atrevería a afirmar que "la Sociedad no enseña eso" no es absolutamente cierto, pues la Sociedad al completo está formada por muchos tipos de sub-sociedades distintas. Hay sectores de la Sociedad donde encontrar estos estímulos y muchos otros; sin embargo hay que querer buscarlos, y saber buscarlos.
Los medios, amigos-familia y religión: no. Estoy 100% de acuerdo contigo.
El sexo, además de físico, tiene un gran componente psicológico. Cuando los miembros de una pareja perciben en sí mismos que algo no va bien (como el que percibe que está decaído, estresado, deprimido o irascente) deben tratar, en primer lugar, de admitirlo. Admitir que algo no va como se desea es el primer paso; el segundo, "idealmente", sería comunicarlo con la pareja, hablar sobre ello sin miedos por el bien común.
Complejo. Influye la educación, la confianza en la pareja, la inteligencia emocional, etc. Si supiera cuál es la solución ideal para que ese "ataque de honestidad" se produjera, escribiría un libro y evitaríamos encuestas de este tipo. Quizá, y con miras al futuro, la solución sea educar a nuestros hijos adecuadamente e inculcarles el valor de la comunicación y el respeto en la pareja.
Porque una pareja es un equipo, un equipo ganador (seguiré soñando mientras pueda).
No entiendo como dicen en el artículo que todos mienten y al final te ponen una puta encuesta sobre satisfacción sexual... ¿no habíamos quedado en que todos mienten? ¿qué credibilidad tiene esa encuesta?
#3: La credibilidad existe, dado que se trata de mentiras para aparentar en la cama no necesitan mentir a la encuesta, sólo a la pareja.