Publicado hace 15 años por pieldesapo a pablorpalenzuela.wordpress.com

c&p "Se llamaba Celia. En enero de 2000 un árbol se desplomó accidentalmente sobre ella aplastándole el cráneo. La noticia recorrió los telediarios. Con Celia desaparecía el último bucardo del Pirineo. Sin embargo, no estaba todo perdido. Científicos del CITA de Aragón habían tomado muestras de tejido y las habían conservado congeladas. A partir de estas células, los investigadores pudieron recrear un embrión de bucardo (o algo parecido) empleando una técnica similar a la utilizada en el caso de la oveja Dolly." Sigue en el artículo.

Comentarios

HeavyBoy

Cuando puedan clonar tiranosaurios, voy a montar un safari

D

#1 ¿Con casinos y furcias? lol

D

chan chaaan chan chaaan chachachaaa chacha chachaaaaan