El Vaticano presentó en 2011 un presupuesto de 306 millones de dólares y un déficit superior a los 18 millones, según datos públicos de la inteligencia norteamericana. Como cualquier Estado, la Santa Sede maneja cuentas millonarias para garantizar el funcionamiento de una compleja administración. Gran parte del dinero proviene de donaciones de todo el mundo. Otra parte, de los beneficios que genera su inmenso patrimonio artístico.
|
etiquetas: iglesia , pobreza , museos , palacios , papa