Hace 14 años | Por maxklein a lorem-ipsum.es
Publicado hace 14 años por maxklein a lorem-ipsum.es

Hace unos años, Jamie Oliver descubrió que la comida que sirven en los colegios públicos ingleses es, como poco, mala. Se acercó a unos cuantos colegios, habló con ellos, y les convenció para que le dejaran rediseñar los menús para hacer los niños felices. Aprovechando que los colegios británicos se pasan la vida haciendo exámenes estandarizados a sus estudiantes, los economistas Michael Belot y Jonathan James sólo tenían que comparar las notas de los estudiantes durante los últimos años, así como las cifras de asistencia.