Haciendo un recorrido histórico nos cuenta que la preocupación de los españoles por la corrupción, el fraude, los políticos y todo lo que les rodea, está volviendo al nivel de 1994-1995, aunque sin alcanzarla. Y que esta inquietud palidece al lado del paro y los problemas económicos que está alcanzando cotas máximas
Comentarios
No tengo ganas de nada... Bueno, ¡de dar hostias!
con estos politicos no hay ganas de nada, bueno si de no votarles