Hace 15 años | Por Rivas a diariodeburgos.es
Publicado hace 15 años por Rivas a diariodeburgos.es

Hace dos años que no nacen en Burgos niños con síndrome de Down. Las madres de los cuatro ‘últimos’ ofrecen, desde su experiencia, una visión esperanzada y positiva de esta discapacidad intelectual

Comentarios

Mordisquitos

#1 No sé yo. Es un hecho que el síndrome de Down, a todos los efectos, es una enfermedad crónica e incurable. Eso en el lenguaje de los niños se traduce como "estar malito".

No sé si es conveniente tanta corrección política. Prefiero que los niños vean a un compañero con el síndrome de Down como alguien igual que ellos pero que le ha tocado "sufrir una enfermedad", es decir en lenguaje infantil "estar malito", a que le vean como un compañero "al que le cuesta más aprender", es decir en lenguaje infantil "tonto".

Intronauta

«A veces en los colegios a los otros niños les dicen que están ‘malitos’ y esto no es cierto, hay que erradicar esta idea y aclarar que, simplemente, les cuesta más aprender»

Que gran verdad! Siguen siendo desconocidos para la gran mayoría, de hecho, mayoritariamente despiertan lastima

andresrguez

"Hace dos años que no nacen en Burgos niños con síndrome de Down."

Es una cuestión de genética y de casualidad, ya que el Síndrome de Down, actualmente se detecta en el embarazo con una amiocentesis, para detectar trisomías en los cromosomas. Si hay detección positiva, generalmente se ofrece a la madre la posibilidad de abortar, ya que aunque no lo parezca, es un embarazo de riesgo, ya que el feto no realiza todas las funciones correctamente y hay peligro tanto para el feto como para la propia madre.

De esta forma, se evitan posibles nacimientos, aunque evidentemente hay mucha gente que no prefiere abortar y seguir adelante y de todas formas, el síndrome de Down, no deja de ser un problema genético, que ocurre al azar y todo es cuestión de azar y que se junten los cromosomas en cuestión

D

#1 quizá tengas razón, en mi colegio había una chica con síndrome de down y con 6 8 años entendían mejor el decirles que no era tan capaz como la media que el verla como una "enchufada" por estar "malita Y se adaptaban y la respetaban mucho más.