Hace 15 años | Por andresrguez a elpais.com
Publicado hace 15 años por andresrguez a elpais.com

"Sin duda, el bipartito hizo una buena gestión en determinadas áreas, incluso obtuvo buenos resultados económicos y una mejora de la cobertura social, pero no supo hacerlo visible y, en cambio, dejó al descubierto sus debilidades. Como si la vieja política, el fraguismo, fuese un gas que flotase en despachos y autos oficiales, impregnase las moquetas y se apoderase de sus sucesores en la Xunta. En estos años hemos visto demasiado continuismo y poco cambio. Y las bases sociales, allá lejos."

Comentarios

alecto

Me quedo con esto, como señalé en el nótame.

Fueron aupados a la Xunta por ese sector social movilizado para que hiciesen otras políticas y para que gobernasen de otra manera, y creo que ahí está la clave de estas horas: esa parte del electorado que se había implicado emocional y políticamente llegó a las urnas no desencantada, sino enfadada. Un enfado mucho más duro del que imaginaban Touriño y Quintana.

#2 Crear una red pública de escuelas infantiles y residencias de ancianos, que se repartían por los ayuntamientos por necesidad, y no por partidismo, por ejemplo. La ley de costas, por ejemplo. El Código técnico de edificación, que prohibe la construcción de pisos sin ventanas, sin un número mínimo de metros, etc. El Bantegal, por ejemplo. Sí, algunas cosas hicieron bien.

El problema es que la mayoría quedaron sumergidas entre un montón de mierda (como la difamación de que las guarderías públicas eran centros de adoctrinamiento de los niños) y el resto del tiempo, una parte demasiado importante, se dedicaron a actuar con prepotencia y arrogancia, a ir de prudentes por la vida y fortalecer aquello que habían prometido eliminar, a no hacer lo que habían prometido y se les reclamaba, a mirar a otro lado en lugar de desatapar la mierda que había en las alfombras... A esperar que el mero hecho de salir en la tele los mantuviese en el poder. Si otros hubieran hecho eso, seguirían ganando...

alecto

#6 En una cosa tienes razón, les he cambiado el nombre a la mitad de las cosas que he citado. Claro que de ley de costas a ley do litoral... el que quiera entender, entiende. Pero si, cuando tienes la razón, se te da. Me refería a la Ley de Protección do litoral (y no, las competencias no son del Estado) http://www.cptopt.xunta.es/portal/webdav/site/cptopv/shared/es/pdfs/dxu/Lei%206-2007_MU.pdf

Y la otra era un reglamento derivado de la Ley de vivenda (que también entraría en mi corta lista http://ecodiario.eleconomista.es/espana/noticias/660355/07/08/Consello-La-Xunta-aprueba-la-Lei-de-Vivenda-que-permitira-a-los-ciudadanos-comprobar-la-solvencia-de-los-promotores.html) que se anunció con cuatro nombres diferentes y acabó siendo, creo, las Normas do Hábitat ( si, debe ser esto http://www.elpais.com/articulo/Galicia/norma/calidad/pisos/entra/vigor/pese/rechazo/sector/elpepiautgal/20080417elpgal_1/Tes ). Nada que ver con lo que he nombrado antes. Mis disculpas.

andresrguez

Basándose en un aparato fuerte, Fraga construyó un sistema de poder cuando llegó a Galicia. Utilizó el clientelismo como sistema para comprar voluntades, utilizó los medios de comunicación públicos y financió los privados con sumas de dinero público que no tienen parangón en Europa, lo que le permitió conseguir así su domesticación. Pero esos instrumentos no serían eficaces si no tuviesen un inteligente contenido ideológico y político que Fraga y el que fue su delfín, el fallecido Xosé Cuíña, tejieron y con el que vistieron al PP transformándolo en un PPdG. Ese PPdG fue casi un verdadero partido nacional gallego, con dirección política propia y que interpretó la cultura gallega y el galleguismo como una forma de populismo, pero que consiguió una gran identificación de amplios sectores sociales con esa idea de Galicia. Naturalmente, la otra cara de la propaganda autoritaria es siempre la censura y la infamia sobre los rivales.

Arrikitinkitan

"Sin duda, el bipartito hizo una buena gestión en determinadas áreas

D

#2 pero no suficientes... a tenor de los resultados.

D

La cagaron en muchas cosas: los incendios, los retrasos en la cobertura de la ley de dependencia, la silla de touriño, el audi...

PepeMiaja

Ni los del PP se esperaban este resultado hace diez días. Ahora, como todo el mundo está sorprendido, aparecen análisis como champiñones, algunos extravagantes, todos heterogéneos, pero olvidan lo fundamental: que el resultado dio un vuelco en tan corto periodo de tiempo. Eso deja en evidencia dos cosas:

- la campaña orquestada de calumnias, manipulaciones, medias verdades y fabricaciones

- la inutilidad de quienes, sabiendo lo falso de esas acusaciones, creyeron estratégicamente convieniente no rebajarse a desmentirlas, razón por la cual (para no quedar en evidencia), en estos momentos no se habla de las primeras ni en los ambientes izquierdosos españoles

Pero la falta de habilidad de la víctima en defenderse no justifica el apoyo a los agresores, que tienen muchas razones para "borrar las huellas" de su crimen, especialmente fuera (pero también la percepción de la importancia dentro) de Galicia. Y ahí tenemos, en este que es el más certero análisis sobre lo sucedido, casi un millar de votos valorando la noticia de los cuales casi la mitad debe de darle la nota mínima, cuando, quien suela leer elpais.com sabe que eso es casi imposible que suceda con un artículo como este.

Recordando la cadencia rítmica de la salida de los bulos y el origen de los mismos, esto me hace pensar más en un golpe de Estado (en este caso de autonomía) del siglo XXI (con otro tipo de "metralletas") que otra cosa.

Sólo con la diezmilésima parte de las invenciones que se han hecho contra el bipartito, si el PP fuese la víctima hubiera ido al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

D

#5 : "Si otros hubieran hecho eso, seguirían ganando..."

Porque los otros son mejores echando basura sobre el contrario, y el comentario #4 lo demuestra. Los del bipartito hicieron cosas mal, no supieron vender las que hicieron bien, se equivocaron al plantear la campaña y no reaccionaron contra los ataques del PP.

D

La ley de costas y El Código técnico de edificación. Son competencias del gobierno central no del gobierno gallego.

El País debería titularlo "El que no se consuela, es porque no quiere"