Lo que no se cuenta de la reforma fiscal: el asalto a la exención de las indemnizaciones por despido
Por una lado una juerga de 300.000 euros, y por el otro que los que sean despedidos tienen que pagar.
Vivir en España no tiene precio.
¿Y por qué no conocían esa cultura en Perú? ¿En otros sitios sí que la conocían?