No hay justificación a una bofetada a un niño. Es un abuso de fuerza se mire como se mire. El niño/a ha de ser educado tal como pretendemos sea de mayor y en esa educación no puede caber el uso de la fuerza como argumento. No he pegado nunca a mi hija. Eso sí, le he mostrado mi descontento cuando correspondía, he justificado siempre mis indicaciones y he premiado y alentado como mejor ha podido lo que consideraba correcto de su comportamiento.
Portada
mis comunidades
otras secciones
No hay justificación a una bofetada a un niño. Es un abuso de fuerza se mire como se mire. El niño/a ha de ser educado tal como pretendemos sea de mayor y en esa educación no puede caber el uso de la fuerza como argumento. No he pegado nunca a mi hija. Eso sí, le he mostrado mi descontento cuando correspondía, he justificado siempre mis indicaciones y he premiado y alentado como mejor ha podido lo que consideraba correcto de su comportamiento.