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Extraña película francesa sobre autodestrucción que jamás se estrenó en salas españolas. La directora Marina de Van interpreta el papel de la protagonista, Esther, una mujer de éxito, inteligente, culta y con un hombre que la quiere. Pero a raíz de un pequeño accidente en una fiesta se obsesiona con autolesionarse.
Largometraje vanguardista con una sobresaliente banda sonora de Philip Glass, y un enorme mensaje geo-socio-político. La primera película que compone la trilogía Qatsi de este director producida por Coppola es sin duda la mas completa y la mas sugerente. Muy original en cuanto a su registro de cine no narrativo, en ningún momento de su duración (87 minutos) nos aburre o carga su bellísima sucesión de imágenes a ritmo cada vez más vertiginoso.
Primeros cortos dirigidos por John Waters, precursor del cine trash, degenerado y perverso.
Extraña película francesa sobre autodestrucción que jamás se estrenó en salas españolas. La directora Marina de Van interpreta el papel de la protagonista, Esther, una mujer de éxito, inteligente, culta y con un hombre que la quiere. Pero a raíz de un pequeño accidente en una fiesta se obsesiona con autolesionarse.
Largometraje vanguardista con una sobresaliente banda sonora de Philip Glass, y un enorme mensaje geo-socio-político. La primera película que compone la trilogía Qatsi de este director producida por Coppola es sin duda la mas completa y la mas sugerente. Muy original en cuanto a su registro de cine no narrativo, en ningún momento de su duración (87 minutos) nos aburre o carga su bellísima sucesión de imágenes a ritmo cada vez más vertiginoso.
Primeros cortos dirigidos por John Waters, precursor del cine trash, degenerado y perverso.