Hace 6 meses | Por Grahml a andaluciainformacion.es
Publicado hace 6 meses por Grahml a andaluciainformacion.es

Guillermo García, una vida marcada por la silicosis, es solo uno de los muchos afectados por una enfermedad profesional devastadora. A sus 58 años, tras un trasplante de corazón, mira hacia atrás y ve su vida laboral como la única causa posible de su padecimiento. Junto con otros compañeros, García se enfrentó legalmente a su antiguo empleador, la marmolería Granitel, y a Cosentino, el mayor fabricante de aglomerados de cuarzo.

Comentarios

cosmonauta

Un producto, el Silestone, que se vendía a precio de oro. Escatimar en medidas de seguridad con esos precios es de ser miserable.

sotillo

Y por desgracia cuanto trabajador sigue sin ver el peligro, a cuantos se ven sin protección hoy día da miedo

torkato

#1 Es triste pero es así. Veo a gente en la obra, con polvo, cortando piedras o escayolas y nada de EPIS porque "molestan" o "eso es de maricones". Luego cuando a los 55 ni pueden respirar la culpa será de que ha trabajado mucho...

D

Una historia parecida a la del amianto. Negligencia criminal, consciente e impune en el caso del amianto. Una Verguenza.

davhcf

Vaya, Consentino otra vez por ahí.