El efecto Déjá Vu aplicado al mundo de los videojuegos

¿Cuál es la definición de opinión? Si buscamos su primer significado en la RAE encontramos que una opinión es “Dictamen o juicio que se forma de algo cuestionable.” Quizás no sea la más justa o quizás la menos objetiva, pero claro está que caemos en un bucle un tanto estúpido ya que dicha selección recae en la opinión del propio autor.

Suena crudo el titular, pero después de ver lo que ha pasado con el DLC de de Modern Warfare no se me ha ocurrido ninguno mejor. Pongámonos en situación: Parece ser que desde que se anunció el precio de salida del DLC, los foros, blogs y demás, se convirtieron en hervideros de críticas hacia este DLC, por lo que se le auguraba un “talegazo” épico como los que reparte Kratos. Pero quejarse es muy fácil, cumplir con las quejas no lo es tanto y eso lo sabe bien Activision y sabe cómo aprovecharse de los fans.

El mundo de los análisis de videojuegos es muy desagradecido. Lo que se escribe normalmente no importa una mierda y quién lo escribe, a no ser que sea un gurú de la industria, tiene una relevancia auténticamente miserable. Lo importante siempre es el medio que lo publica y el dichoso numerito de marras. Permítanme pues, queridos lectores, hacer un alegato en favor de esas personillas con nombres y apellidos que, por desgracia, quedan sepultadas bajo nombres corporativos y la falsa “objetividad” de los medios.

El cine y los videojuegos siempre han estado ligados de una manera u otra. Desde los primeros tiempos se empezaron a programar videojuegos basados en películas y con el paso de los años llegaríamos a ver películas basadas en juegos. En esta serie de artículos vamos a intentar hacer un repaso a las diferentes adaptaciones que se hicieron de historias cinematográficas en nuestras pantallas. Me centraré únicamente en los juegos Abandonware, es decir, juegos para PC que ya se pueden considerar clásicos y a su vez, han pasado a mejor vida

Aquí os traigo el primer tráiler de Fallout: New Vegas, la nueva entrega de las prestigiosa saga de los chicos de Bethesda que viene dispuesta a convertirse, de nuevo, en el juegazo del año.

Hubo un tiempo en el que todos los juegos eran buenos, y no porque realmente lo fueran, sino porque no existían ochocientos sitios en la red que te convencieran de lo contrario. Daban igual las tendencias y los géneros, todo era diversión, y solamente un puñado de humildes publicaciones servían como referencia a un público que todavía no había llegado al nivel de saturación en el que nos encontramos ahora mismo. Hubo un tiempo en el que nadie nos decía que juegos teníamos que comprarnos.

Los Simpson, esa amarillenta familia que lleva acompañándonos 20 años (aunque yo soy más de Padre de Familia), están de suerte. Y es que ha llegado a Springfield la consola que está causando furor en todo el globo terraqueo, la Nintendo W…un momento, la Funtendo Zii (¿Eso no lo tenía registrado Nintendo?).

En un principio, el título de éste artículo iba a ser: ¿Que pretenden Microsoft y Sony con Natal y Arc? Pero decidí cambiarlo porque la respuesta era obvia; intentar llevarse al bolsillo el mercado de Nintendo Wii. Por ello, decidí darle un vuelco y preguntarme; ¿Nos beneficiarán a los hardcore Project Natal y Arc? Mis dudas son varias, y después del salto las veréis expuestas.