La atención es la capacidad de mantener un proceso mental, en el tiempo y en el espacio, a pesar de estímulos distractores. Por proceso mental me refiero a cualquier tipo de actividad cognitiva, una entre las muchas tareas perceptivas, analíticas o mnemónicas que lleva a cabo nuestro cerebro, y que la psicología intenta identificar y clasificar en habilidades específicas. Mantener en el tiempo quiere decir sostener esa actividad un lapso suficiente para que pueda dar un resultado útil, y mantener en el espacio se refiere a que, en general, este
Cuando la temperatura exterior sube a más de 35 °C, el organismo tiene que hacer esfuerzos inusuales para adaptarse, a riesgo de fatigarse. En algunos aspectos, el ser humano funciona como un sistema térmico: intercambia constantemente calor con su entorno, y su fisiología genera la producción de unos cien vatios de calor que debe eliminar para mantener su temperatura entre 36 y 37,5 °C, sean cuales sean las condiciones climáticas que le rodean.
Cuando a una generación la crías creyendo que es especial, conforme se percata que no consigue todo lo que quiere, que es imposible que esté fallando o que sea engañada, se crean pequeños tiranos, dictadores extraviados. Se auto-convierten en legisladores, jueces y ejecutores al mismo tiempo, y toda opinión o argumento lo rebaten si no coincide con el mundo que ha creado su enorme ego para sobrevivir. Pero ya se sabe que en el centro del universo no hay nada salvo soledad. Lo más terrible es la coincidencia de existir al mismo tiempo que la herramienta que casi todo lo conecta, donde se vierte el ego mundial y se genera un potingue y amalgama en donde todo tiene que ser visto, leído, escuchado y probado: ser descifrado. Ruido eterno dentro del silencio.La terrible moraleja es que somos reyes dentro de una nuez, porque conozcamos mil personas mediante redes sociales para demostrarles lo especial que somos, es un número insignificante comparado con el total de población del planeta.Somos dueños de una parcela corriente. Ahí morirán tus sueños, ser especial.
Virus gigantes hallados en la capa de hielo de Groenlandia podrían ayudar a reducir el derretimiento del hielo y a moderar su impacto ambiental.
Un grupo de investigadores en Groenlandia descubrió que el deshielo de la zona libera una clase de virus gigante hasta ahora desconocido en el entorno. En lugar de alarmarse, los científicos de la Universidad de Aarhus, Dinamarca, planean aprovechar las capacidades de este organismo para mitigar el derretimiento en el norte. El virus gigante vive dentro de un complejo ecosistema microbiano que rodea la vegetación que florece sobre la nieve de Groenlandia. Aunque aún no saben qué tipo de patógeno es y no han logrado aislarlo, existen huellas genéticas de su actividad por todas partes.
Rodearte de gente monotema, cerrada y obtusa, con récias raíces en su círculo de confort, te crea o fuerza una identidad.Para encontrar tu propia identidad, saber quién eres, tienes que alejarte de lo que conoces, sobre todo si resulta tan familiar.Temo que eso significa alejarte de tu lugar natal, círculo de amigos, familia y, principalmente, de tus costumbres.Nos hemos ido definiendo a partir de lo que hemos visto o nos han contado otros. Esa especie de instinto de supervivencia es un lastre cuando ya nos valemos por nosotros mismos.Toca despojarse de quienes somos para saber quiénes somos.
Antes del té, tuvimos que cambiar de sitio en el hotel donde estábamos porque había mucho ruido, una señora estaba pasando la aspiradora, algo que a él le molestaba. Vestía una chaqueta de la marca A.P.C., como tuve ocasión de fijarme. Luego busqué A.P.C. en Google. Su chaqueta costaba 300 o 400 dólares. Citó a Deleuze. Una compañera de fatigas me preguntó, al terminar, qué me había parecido el autor importante. “Un psicópata”, contesté, “un psicópata al que el mundo le ha dado la razón”.
¿Qué es el tiempo? Un concepto tan familiar parece no requerir explicación. Sin embargo, la física moderna ha desmontado muchas de nuestras intuiciones y el tiempo resulta, en gran parte, una ilusión.
El debate sobre el verdadero significado del tiempo, incluso sobre su propia existencia a un nivel fundamental, está hoy más vivo que nunca y entronca con las cuestiones más profundas de la física teórica.
Cuando Alfredo (nombre ficticio) era pequeño, creía que todas las personas iban vestidas como romanas a sus espaldas. Si las tenía de frente, todo era normal, pero, al darse la vuelta, ¡zas!, tenía la sensación de que se cambiaban, corriendo, ataviándose como en el Imperio. No podía verlo, pero lo sentía, por eso se giraba rápido e inesperadamente, veloz, como quien juega al chocolate inglés, para tratar de sorprenderlas, para encontrar vestigios: unas sandalias, una toga, ¡ajá! Pero nada. Siempre que miraba, aunque fuese por el rabillo del...
La canción de Queen We are the champions plasma las opciones que la competencia ofrece: o bien se es el ganador que alcanza todo lo deseable o bien el perdedor que no disfruta de la simpatía de nadie. La pregunta que nos debemos plantear es si el concepto de competitividad debe ser adaptado o complementado en los modelos de aprendizaje para alcanzar mejores resultados en nuestra sociedad. La competitividad es un rasgo humano analizado ya hace siglos por el naturalista inglés Charles Darwin, quien observó cómo la sociedad humana se caracteriza
Antes de sacar los cascos de realidad virtual de la edad oscura con Oculus, antes de ser despedido por Facebook a raíz de sus confusas y polémicas donaciones políticas, antes de pasar a fundar un contratista de defensa llamado Anduril que construye drones letales (¡!), Palmer Luckey era un modder de Nintendo Game Boy. Y es cierto. Hay fotos que lo demuestran, y hoy nos desvela su propia versión de la Nintendo Game Boy con cartuchos definitiva, una que se puede comprar por 199 dólares.
Palmer Luckey lleva 17 años trabajando en crear la Game Boy perfecta. Con este producto cree haberlo conseguido.
En una conversación con su colega Cillian Murphy, Margot Robbie contaba que había creado su personaje de Barbie basándose en las personas que no sienten su voz interior, ya que estas suelen reflexionar menos sobre lo que les ocurre en su vida diaria. No es algo excepcional, ya que un pequeño porcentaje de la población manifiesta la carencia que inspiró a la actriz australiana. Es lo que recientemente se ha bautizado como anendofasia.
La Fundación Kafka había planeado una serie de eventos culturales, conferencias y exposiciones para honrar el centenario de la muerte del autor, sin embargo esas actividades han quedado en suspenso debido a un laberinto inhumano de trámites, permisos y regulaciones, según ha denunciado Petr K., el director del Museo Kafka, ubicado en Praga.
Los viajeros ahora se apuntan a excursiones guiadas sin teléfonos para escapar de las ataduras tecnológicas de la vida cotidiana. Costa Rica es uno de sus destinos.
Tuvo un enemigo literario acérrimo en vida y tras su muerte: Jorge Luis Borges, bajo cuyo influjo Adolfo Bioy Casares llegó a calificarlo como “el peor escritor del mundo…” En este informe repasamos la trágica vida y la deslumbrante obra de Horacio Quiroga, el cuentista uruguayo que amó la selva y la describió con todas sus luces y sus sombras.
Enroque de Euro Gamer analiza el efecto del "day one" en la industria del videojuego.
Como Rodrigo Cortés acaba de publicar un libro, Jordi Wild le ha invitado a su canal de YouTube para hablar sólo sobre películas. La charla se alargó durante más de cinco horas, y ni una sola vez hablaron del libro. Esto me parece muy edificante. Las secciones de Cultura están llenas de escritores que hablan sobre los libros que han escrito, algo que debemos condenar y, en la medida de lo posible, destruir. No hay nada interesante que decir sobre el libro que has escrito. Todos los escritores de hoy se han sentado en una silla y...
En varias ocasiones he tenido ocasión de narrar una anécdota que aquí retomo de nuevo. En los años en los que yo era estudiante en París, en las postrimerías del régimen de Franco y en razón de uno de los desmanes del mismo, que supuso la expulsión de varios profesores de la Complutense, visité a un grupo de filósofos (Althuser, Foucault…) para que, junto a otros intelectuales, firmaran una carta de protesta. Aún vivía por entonces Jean Wahl, pensador francés arrestado durante la ocupación nazi por su condición de judío, fugado del campo de...
Una historia a lo largo de los años, los robots gigantes, una mona llamada Tina Mazapán, Frankenstein y Torrebruno.
Este 2024 se antoja un año clave en lo que respecta aniversarios. Sin ir más lejos, hoy te hemos avisado del estreno de Nausicaä del Valle del Viento en nuestros cines, con motivo de su 40 aniversario. Además, a finales de año también se celebrarán los 40 años de Dragon Ball, la famosa obra de Akira Toriyama.
Adobe tiene una nueva política de uso desde el pasado mes de febrero, pero está siendo ahora cuando los creadores se están dando cuenta de lo que realmente están aceptando. Unos nuevos términos de uso obligatorios que suponen una invasión a la privacidad enorme.
Rescato este artículo, que no he tenido tiempo de revisar en profundidad, perdón.Que el cine comercial es de dudosa calidad siempre ha sido algo relativo desde hace décadas. Se considera a los ochenta y principios de los noventa como un antes y después del cine, pero temo que el factor nostalgia siempre ha sido más fuerte que la razón; que una década sea un éxito en cifras no significa nada a nivel artístico. Los Cazafantasmas molan, son originales y creativos, pero no son más que carne para merchandising y pronto reboot, remake o reshit, como quieran llamar ahora a los productos que siempre han estado.Confieso que mi reseña ya se nota y huele requemada, y no es para menos:La película de Momo.Basada en el libro de Michael Ende, aquel que brindara al mundo su humanismo bajo la forma de libros como el citado, El Ponche de los Deseos o La Historia Interminable, ha sido maltratado de nuevo tras aquellas lejanas pero bien recordadas películas interminables (casi nunca mejor dicho). En serio, dejad el factor nostalgia, matadlo sin miramientos y volver a visionar las películas de La Historia Interminable. Salvo por buenos efectos que harán del deleite de los más jóvenes, tiene la profundidad de una piedra lanzada al mar, o sea, algo tan olvidable como irrecuperable aunque se revista de un momento nostálgico en la playa, jugando sin piedad con esa fibrilla que vibró cuando leímos el libro.Y es que, por favor, que sea una adaptación no significa que vaya a ser lo mismo.Una adaptación es lo que es y está en su derecho de tomar licencias para poder llevar la obra a otro terreno que no es el suyo. Cuando lees un libro donde la narración y el estilo son una maravilla de la elaboración, ten por seguro que por lógica en cine no será lo mismo, es un aspecto que se tiende a confundir, a tener como prioridad a la hora del visionado. La literatura es un campo abstracto y el cine es un medio visual, son incompatibles salvo en su naturaleza artística o de ideas. Ese punto en común, por mínimo que sea, es la excusa perfecta para adaptar, ya sea porque al director o al guionista les haya gustado demasiado cierto libro o porque los productores comprueban cuál es el best-seller del momento con posible potencial.Nada nuevo bajo el sol.Hasta ahora.Mi enojo y falta de objetividad se debe al despropósito que han hecho con Momo. Hubo una adaptación animada y otra de imagen real tan torpes como inocentes, y se les perdona. Pero esto, esto…Y todo comenzó con Tim Burton, como siempre.Soy fan aférrimo de los libros de Alicia. La película de Disney me afectó cuando crío y re-descubrí ese mundo siendo adolescente tardío, percatándome del estilo único, los juegos de palabras (aun siendo traducciones, buen trabajo) y la imaginación que llegó a tener este matemático (matemáticas, he ahí una de las claves del éxito de Alicia o Momo, pero esa es otra historia). A partir de aquí se creó un género basado en las aventuras de un infante en un mundo que le supera por lógica, alegoría en paralelo a lo que le puede suponer a un niño la aventura de comprender el mundo, en ocasiones tan contradictorio. Es llevar el género infantil o de aventuras a un plano más abstracto y profundo. Trabajos como Coraline, El Viaje de Chihiro, Dentro del Laberinto o decenas de series infantiles continúan el legado, enseñando a los chavales en un plano que no se puede explicar con palabras, todo aderezado de gran imaginería. Una de las esencias de Alicia es el enfrentamiento de la lógica digna de una niña marimandona contra los abstractos de dos mundos al revés. Los niños están llenos de imaginación e inexperiencia, pero si tienen que corregir a un adulto, lo hacen, si tienen que responder bien en clase, lo hacen, y si ven algo fuera de su lógica como personas lo corrigen sin preguntar. Esos detalles que hacen humanas a las historias de Alicia sólo se plasman en la adaptación de Disney, por parte del resto juegan a lo fácil como si, como siempre, la gente fuera tonta. Si un niño lee un libro aprende e incluso comprende conceptos, ¿por qué no va a suceder así con una película?Otra de las gracias de estas obras es que son atemporales, y eso también significa que se pueden leer a cualquier edad. El Hobbit es un grandioso ejemplo, obra maestra de una tarde o dos que evoca esa emoción del inicio de un viaje, metáfora de comenzar proyectos o encontrar novedades en una vida rutinaria arraigada en la comodidad: si vas a por los problemas (el dragón), obtendrás tu recompensa. Pero no, llegó el gordo de Hollywood y triplicó la mancillación. Tres películas de una novela corta, ¡toda una oda a la superación! Si se puede hacer peor, se hará.Da igual cómo sea una adaptación mientras respete la esencia. Si es difícil de conseguir, no lo toques, o espérate, porque jamás perdonaré el modo en que la película de El Hobbit corrompe con gusanos metafóricos unos de los mejores capítulos escritos como es “Acertijos en las Tinieblas”. En el libro es emocionante, da miedo, despierta la mente, alimenta la ilusión que se hace uno de la escena y hace partícipe al lector. En la pantalla es una escena sosa, un diálogo de tantos que juega con la interpretación que nos acostumbra la mayoría de películas comerciales, y encima con dos buenos actores. Bravo, Peter, creía que era imposible fastidiarla con esa escena.Pero el dinero llama al dinero.Como comentaba, todo empezó con Burton, o quizá antes, pero mi mente me coloca en él. Su adaptación de Alicia (con pronta segunda parte) es aburrida y tópica, algo impensable e imperdonable al tratarse de una historia basada en el imaginario de Alicia. Hasta los fan-fiction y segundas partes apócrifas tienen más cariño y emoción. Es que, claro, es Tim Burton, y como tuvo su época dorada ya el resto será digno, atrapados en un juego muy similar al del factor nostalgia. No quedan ni resquicios de él, el hombre lo sabe, pero el cheque llama y alude, y el pobre siempre se promete no volver a caer. Se dice hacerlo mejor y volver a sus orígenes, y cumple e insiste por esa película innecesaria de su primer cortometraje (un perro-frankenstein sólo funciona en corto, la verdad), por “Pesadilla antes de La Novia Cadáver” o por esa inminente segunda parte de Beetlejuice. Sin palabras.Aun con esa falta de esfuerzo creativo que se pasea por Alicia de Burton, es magia en comparación a la película de Momo.¿Cómo empezar? Llevo mil palabras para intentarlo. Sabía que este momento iba a llegar, y aún me siento incapaz.En fin. Vamos allá.La idea original de Momo juega con el corazón de forma creativa y entrañable, encima haciéndote pensar. Toca hilos del alma que sólo se puede entender cuando se lee. Llevar el concepto del tiempo a lo infantil, lograr una oda a la imaginación como pocas veces se ha escrito es una tarea admirable. Ende estuvo fino en su inspiración, y generaciones de lectores le debemos la vida interior.Este libro nos habla de la infancia (Momo y sus amigos), del trabajo bien hecho con calma (Beppo), de lo peligroso que es ver cumplidos algunos sueños o deseos así como del paso del juego a la responsabilidad (Gigi) y, sobre todo, del tiempo, de la importancia que tiene algo que no existe físicamente y que sin embargo define al mundo. El libro agarra al tiempo y nos enseña su otro lado, su matemática oscura bajo la forma de Los Hombre Grises, seres que bien podríamos ser cualquiera de nosotros una vez pasamos la infancia.En la película no veo nada de esto: NADA. De hecho hasta se burlan cuando Momo insinúa a Beppo toda la faena que aún le queda por hacer y éste resopla y responde en supuesto gag cómico.Es, es… me duele, es increíble lo difícil que es lograr eso aunque se hubiesen copiado tal cual las escenas. Desde la personalidad de Momo, más típica a una chavala adolescente actual (de películas, no de la realidad), hasta ese villano principal que sacan de bajo la manga que incluso por momentos parece ir en contra de sus propios ideales y propósitos. Todo está mal, todo, desde los actores a los efectos especiales que sólo sirven para rellenar el vacío de la historia (aunque si la hubiese dirigido Tim Burton todo el reparto hubiese sido Johnny Depp). Sentí vergüenza ajena, lo juro, en el momento en que Momo sigue a Casiopea por el borde del tiempo, por esa representación poco disimulada de las calles de Nueva York como si no existiesen más conceptos de ciudad que no sean esa o Los Ángeles, por esos brillos gratuitos que acaban mareando o esa escena de una supuesta catarata temporal donde Momo tiene que usar sus habilidades ninja para salvarse, escena que recuerda demasiado a Piratas del Caribe o la escena de los barriles de la segunda del Hobbit. Son momentos de acción en una película que no lo necesita, son rellenar minutos en una película que no necesita durar dos horas, una ironía al mensaje original del libro, pues parece ser que hoy necesitemos películas cada vez más largas con tal de llenar el tiempo con lo que sea. Que ya que he nombrado lo de los piratas, menuda decepción y heraldo de lo que acontece cuando esperaba la escena en que lo niños juegan imaginando ser piratas hasta el punto de vivirlo, pues es un capítulo del libro que hace regresar a la infancia, y me encuentro en la película una escena donde los críos hacen el tonto, con referencia a Peter Pan como si tuviese algo que ver (por no mencionar el rancio superhéroe-pirata que se inventa uno de los niños para dejar clara su obsesión por Los Vengadores), ignorando enseguida para continuar una trama que aún se alargará por dos horas…Dos horas de puro hueco. Un agujero negro en un punto de mi vida.Estafado, me siento así, pero no a un nivel expresivo, monetario o mental, sino del alma, y eso que no soy religioso. Siento que me han llamado de idiota para arriba hasta el punto de ofender de una forma cercana a la depresión. Es increíble el afán que tiene el cine comercial por mantenerse encerrado en su fórmula sin importar cuál sea la obra. Hay que meter acción, un villano muy malo atrapado en sus ideas, efectos cargantes que cumplen la función de un llavero agitado frente a un bebé; humor, más humor, personajes molones porque lo saben hacer todo, humor contemporáneo que envejecerá mal, un/a protagonista vacilón/a con su falta justa de personalidad para poder identificarse, el personaje rejuvenecido de turno para que pueda ser el noviete y chico guapo (escena sin camiseta incluida aunque sea un crío) y dos frases filosóficas para creer que estamos ante una película profunda. Lo único que adaptan bien para los tiempos de ahora es la obsesión por las tecnologías, posible perjuicio e imaginación contaminada para las generaciones más jóvenes, aunque…No. Jamás esta palabra había tenido tanto sentido.No se trata con mi reseña interpretar al tópico del gruñón que no le gusta que le toquen sus cosas. Hay adaptaciones que adoro aunque suden del original, pero porque mantienen la esencia, porque han entendido de qué va la cosa y se esmeran en plasmarlo. Hay una película ochentera y alternativa del Mago de Oz que sólo se parece al original por la protagonista, y aun así da lo mismo, te ofrece esa aventura, esos personajes con carisma, esa lección que no se explica y que entiendes.Pero es que ahora, en fin, hay que explicarlo todo. En el libro de Momo el mero hecho de ver cómo actúan Los Hombres Grises es suficiente para comprender qué nos quiere decir el autor. Un niño puede perderse en el concepto, pero lo pilla, sabe de qué va la cosa y aprende de ello porque una acción vale más que mil palabras. Y llega la película y te suelta un discurso final gratuito sobre el tiempo que logra romper toda la narración acontecida. Es como cuando te explican un chiste, ¿a que fastidia? Pues imagínalo a nivel épico después de dos horas.Esta película es atemporal, pero porque debería existir fuera del tiempo.A nivel comercial cumple, es otro éxito de tantos para el cine de este tipo. Pero a nivel humano es un desastre. No se trata que el mundo lo sepa ver, de convencer a nadie, se trata de que ya está bien que nos traten de tontos. Me da igual que se use el arte para vender, es legítimo. Lo que me mata es que uno escriba una historia con todo el cariño del mundo y llegue el aprovechado que va de o para empresario y se aproveche de ello como si tuviese el derecho o la superioridad moral, y más cuando ya se está muerto.Los cuentos y novelas infantiles son lecciones universales para todas las edades. Crean legado y se cuenta la misma historia y mensaje una y otra vez porque es necesario, acaso una verdad que necesita ser dicha.En lugar de una adaptación de Momo, me he encontrado con otra piedra en el camino para ser mejor persona. De haber estado bien hecha, habría resucitado esas lecciones y momentos que viví con la Momo real de mi imaginación, un repaso a la esencia de la vida.Masoquista de mí seguiré viendo cine comercial, temiendo que la próxima que pondré a parir será la de IT. Al menos no todas son películas pare odios, pero ofende que luego te traten de gafapasta porque prefieres el cine de autor. Al menos ellos no tratan a nadie de tonto, todo lo contrario. Esa es la gran diferencia que habla mucho del público de hoy día. No quiero ir de héroe cultural, pero me es imposible apartar la vista ante lo que es una injusticia. Si uno puede denunciar por lo que le ha ofendido o dañado en extremo, ¿se puede dar el caso con una película?Injusticia. Eso es lo que ha sido esta película. Ojalá exagerara.Como alguno ya se habrá percatado, la película de Momo de la que trato no existe. La reseña es un intento de visión sobre el futuro. Tarde o temprano volverán a hacer un remake de La Historia Interminable que funcionará a nivel comercial, y con ello vendrá Momo. A menos de que la dirija Guillermo del Toro (como casi pasó con El Hobbit, vaya), van a lograr que los amantes del libro soñemos sangre. Quizá exagero en mi apreciación, aunque en este caso sí puedo asegurar que el factor nostalgia no tiene nada que ver y sí los hechos.Un saludo y gracias por su comprensión.
Resulta casi imposible desligar la obra y el pensamiento del autor judío-austríaco Stefan Zweig de su “idea de Europa”. Este concepto aúna el lamento nostálgico ante la pérdida de un “mundo” (y con ello una manera de verlo y habitarlo) y el anhelo por un sueño todavía por realizar, la apertura de la experiencia y la memoria al espacio de lo utópico. Ambas dimensiones de la Europa de Zweig –nostalgia y utopía, pasado y futuro– cobran vida y se entrecruzan en su autobiografía El mundo de ayer (1942). Su subtítulo, “memorias de un europeo”, da...