#4 no es facil contar las cosas. Uno tiene que tener límites entre lo que te piden los medios y tu visión. No existe la objetividad, es imposible no implicarte cuando viajas a estos sitios y tomar partido, partido por los civiles que son los verdaderos protagonistas de estas pesadillas.
Anécdotas mil y no todas se pueden contar. Te diré que una vez casi me estalla una granada encima simplemente porque la persona que la lanzó no tuvo la fuerza suficiente y rebotó en la pared, cayendo de vuelta sobre nuestros pies. Anécdota feliz, pues una vez me deje mi cámara dentro de una cárcel de max seguridad en el Salvador, en el patio lleno de mareros y ellos mismos se encargaron de devolvérmela cuando salía de la prisión. Respecto de esa y otras polémicas diré que es muy fácil criticar desde el sofá de casa...no lo digo por ti si no por muchos...
#9 yo relativizo ningún horror, al revés me he vuelto más sensible, lloró con facilidad y mi furia crece cuando veo algo de ese tipo. Si fuera palestino dependiendo del contexto podría ser activista o empuñar un arma, es difícil ponerse en su piel pero muchos seríamos guerreros en determinados contextos. Si he visto o no asesinatos no es relevante tampoco que banda es más cruel Lo que importa es la gente, lo civiles que ya han sido olvidados por la sociedad y medios españoles.