Sin perjuicio de que, en efecto, en el ámbito laboral existe todavía mucha discriminación, no creo que razonablemente pueda sostenerse que una crisis va a incentivar dichas dificultades. A mi me da la impresión de que esta tipa es una pija-progre que hace el papelín que le han dado pero que no tiene ningún contacto con la realidad.
Martita le ve con buenos ojos, el resto del mundo se descojona de Cañón.