d

Hombre! por fin los Verdes han hecho algo con sentido.

El problema de esos anuncios es que nos acercan más a la metáfora del hombre de cristal. Esa en la que se pretende que todos podamos ser mirados con lupa por las administraciones porque no tenemos nada que ocultar. Obviamente es una metáfora nazional-socialista y es el camino que se coge cuando se incita a la población a denunciar conductas sospechosas. El resultado es que todo el mundo puede vigilarte y decidir si estás haciendo algo mal.

Yo estoy de acuerdo con que se hagan campañas para acabar con la violencia de género, pero creo que las que se hacen hasta ahora van muy mal encaminadas. Todas intentan asustar de alguna forma a los violentos, diciendo algo como "mira lo que te va a pasar" o presentando a las mujeres en actitud reivindicativa (lo cual no estaría mal si no estuviesen reivindicándose contra un hombre violento, algo peligroso para mi). También hay otras en las que el resto de hombres salen mirando mal a los violentos y poco menos que abucheándole. En definitiva me recuerdan al video con el perro rabioso que lanzó el PSOE hace algunos años. Difundiendo miedo, chulería y represalias.

Quizás algún psicólogo podría arrojar un poco de luz, pero para mi el gobierno debería intentar acercarse a los violentos, tocarles la fibra sensible, hacerles ver que hacen daño a las personas que más quieren y que deben intentar dejar de hacerlo, y para ello deberían existir terapias (creo que alguna vez he visto algún reportaje con grupos de tratamientos para hombres violentos). Lo que quiero decir es que no creo que los violentos sean gente que un día decide serlo, o que lo sean porque no piensan o porque simplemente creían que no les molestaba a nadie. Creo que tienen un problema muy grande (es obvio que sus mujeres lo tienen doble) y que habría que ser más inteligente y procurar captarlos y tratarlos. No creo que mil policías puedan, en este caso, hacer el mismo trabajo preventivo que una buena terapia.

c.m.a.

completamente de acuerdo con #40. Que se nos inste a denunciar a nuestros vecinos acusándonos de cómplices en el caso de no hacerlo. El poner a todos los hombres en el punto de mira como posibles maltratadores. El pintarnos a todas las mujeres como víctimas potenciales del maltrato, y sobre todo el estar todo el santo día dando la barrila con el tema en todos los medios de comunicación, creo que nos aleja de la solución, o por lo menos de la única solución que veo yo al problema, que es la educación en el respeto.

Parece ser que la edad en el perfil del maltratador se está reduciendo y eso sólo puede significar un fracaso en la educación. Y ahí es dónde habría que atacar el problema. Habría que educar para el respeto a todo el mundo: a padres, profesores, parejas, niños, animales, propiedad publica y privada... y ahí está fallando la educación estrepitosamente.

si el ministerio de ¿igualdad? invirtiese el dinero de sus sórdidas campañas en reeducación y reconducción de los maltratadores, en formación de los padres para que sepan marcar pautas a sus hijos, en reciclaje a los profesores para que puedan detectar y reconducir a los cafres-futuros-maltratadores a tiempo, quizá viviríamos en una sociedad tolerante y pacífica y no en un estado ciudadano-policial.

d

#38 ¿No estáras insinuando que todas las pelis que reciben subvenciones, y que sólo se proyectan un día o en salas ridículas para cumplir con lo establecido por la subvención, dan suficientes beneficios para que los impuestos sobre estos cubran la subvención? ¿verdad?

b

#45 #38 Esta hablando obviamente de que si no dan suficientes beneficios devuelven el dinero de la subvención de su propio bolsillo. Y ya ni hablar de las que ni se estrenan, esas devuelven todo el dinero de su bolsillo, al fin y al cabo todos sabemos que los promotores de cine solo están para la creación artística, nunca para ganar dinero.

Un saludo,

d

Ya sé que es perder el tiempo, pero lo voy a volver a intentar.. soy masoca.

El problema de Windows y Microsoft no es de calidad de software, ni de si es mejor o peor que linux, ni de qué programas soporta o si son mejores o más bonitos. Es un problema político y social, es un problema de libertad y de macro y microeconomía.

Para resumirlo, Microsoft reparte software privativo para que toda la sociedad de un país aprenda a usarlo. Para ello lo hace en las universidades y en las escuelas. Así se asegura que esa sociedad use su software en sus casas y luego en sus trabajos (pagando, por supuesto). Para asegurar que existan los mínimos transfugas posibles hace sus formatos incompatibles con el resto, da a sus navegadores funcionalidades únicas y los hace incompatibles con los standards. En fin, seguiría pero la lista es muy larga y la idea se entiende y hay que explicar lo más importante.

Si un gobierno decidiera apostar por un sistema operativo abierto, lo distribuyera entre sus escuelas y universidades, se gastase lo mismo que en las licencias privativas pero para pagar desarrollo que luego se liberaría... Obtendría un sistema operativo gratis para toda la población de por vida, optimizado según las características y necesidades propias de su población. Así generaría además microeconomía, osea grupos de desarrolladores que basarían su negocio en desarrollar las herramientas necesarias, vendiendo sus servicios sobre software libre. Software que luego otro desarrollador podría continuar, o sacar versiones con distintas características, etc... Todo esto en un ámbito local, enriqueciendo la población autóctona y no enviando millones de euros de toda la población a una compañía extranjera. En fin, un ejemplo práctico sería Brasil y la política de desarrollo orientada al software libre que ha propulsado Lula.

Alguien lo habrá pillado. Para que se entienda, si un software no existe como código abierto la solución no es que todo un país pague por la versión propietaria, la solución es que se destine una centésima parte de toda esa pasta en desarrollar un programa equivalente pero libre.

d

A mi hace tiempo que se me está ocurriendo una solución que ha funcionado bastante bien a lo largo de la historia, el problema es que no recuerdo donde he guardado mi antorcha.

d

Pues yo tengo un amigo, matemático, que siempre me dice que Murphy en las cajas de los supermercados no perdona, así que aconseja ponerse en la cola de la cajera que esté más buena (o del cajero que esté más bueno si sois una chica). El racionamiento es simple, ya que vas a tener que esperar de todas formas al menos que el rato de espera sea agradable