[Versión en español]
El gallego, "barrido" del 95% de la enseñanza infantil en las ciudades
En el verano de 2010, la Consellería de Educación hacía públicos, a través del entonces secretario general de Política Lingüística, Anxo Lorenzo, los resultados de su controvertida encuesta sobre la lengua en la enseñanza, una encuesta que llenó de recelos a buena parte de la comunidad educativa y para la cual la Xunta contrató los servicios de una empresa privada, aunque inicialmente había negado tal extremo. Aquel estudio demoscópico señalaba, entre otras cuestiones, que el 53% de las familias con hijos y hijas en educación infantil que habían respondido a las preguntas preferían que, en ese nivel educativo, la enseñanza fuera bilingüe, en gallego y castellano. En el inicio del siguiente curso escolar, el 2010-2011, Educación volvió a preguntar por la lengua en infantil y, por provincias, en A Coruña el gallego fue el preferido por el 41%, en Lugo por el 42%, en Ourense por el 41% y en Pontevedra, por el 25%. Dos años después, estas cifras están muy lejos de cumplirse en la realidad.
Este incumplimiento es, cuando menos, lo que detecta La Mesa por la Normalización Lingüística, que acaba de realizar su tercer estudio con respecto a la presencia de la lengua gallega en las clases de enseñanza infantil de las siete ciudades gallegas. La asociación en defensa de la lengua preguntó en 282 centros educativos -públicos, privados y concertados- por el idioma empleado en este nivel educativo y el resultado, resume su presidente, Carlos Callón, es de un verdadero "barrido" de la lengua propia de Galicia. No en vano, y a pesar de las preferencias de las familias del alumnado, el gallego está ausente por completo en el 95,04% de los centros.
Segundo "declaran" los centros consultados, la suma de aquellos que emplean total o parcialmente el gallego en la enseñanza de niños y niñas de 3 a 6 años no supone más que un 4,96% del total, esto es, 14 colegios en todo el país. En estos se incluyen los 9 que dicen impartir todas las aulas de infantil en gallego -el 3,19%- y los tres que "indican que tienen dos líneas", una para el gallego y otra para el castellano. Estas cifras, explica Callón, suponen que la actual situación no es "de bilingüismo, de trilingüismo ni de harapos de gaita", sino de una "exclusión" de la lengua propia que, asegura, no tiene parangón en ninguna otra autonomía con más de un idioma.
Buena muestra de la situación son también los números absolutos del estudio de A Mesa. La ciudad con más centros de enseñanza que imparten la educación infantil en gallego es Lugo, con tres colegios. La siguen Ourense, A Coruña y Santiago, con dos, y cierran la lista Ferrol, Pontevedra y Vigo, con un solo colegio cada una con aulas de infantil en gallego. El sondeo le sirvió también a la asociación para obtener elocuentes datos, como los de un centro de Vigo "en el que el español ganó por uno solo voto, pero toda la enseñanza infantil se imparte en castellano", o "uno de Santiago, en el que dicen sin rubor que las familias contestaron" que deseaban "enseñanza en gallego, pero ellos saben que la lengnua de los niños es el español" y dan las clases en este idioma.
Desplome en dos años
La elocuencia de las cifras es aun mayor echando mano de los dos anteriores estudios elaborados por A Mesa. En el curso 2008-2009, aún con el decreto 124/2007 en vigor -que establecía un "mínimo" del 50% de las clases en gallego- la presencia del gallego en la enseñanza infantil urbano era del 35%. En el siguiente curso, 2010-2011, ese porcentaje quedaba ya en el 10%. En todos los casos, señala Callón, esto equivale a estar "por debajo de la legislación vigente", pasando por encima de normas como la Ley de Normalización Lingüística, pero también obviando el propio decreto del plurilingüismo. "El decretazo dice que tiene que haber atención" al alumnado que emplee el gallego en aulas impartidas en castellano, así como una labor de "introducción" de la lengua gallega en los entornos castellano-hablantes. "Pero esto no se produce", subraya.
Así las cosas, desde A Mesa pola Normalización Lingüística concluyen que "cuando Feijóo habla de trilingüismo" está empleando "su habitual cinismo" y "chulería para mentir", ya que "los incumplimientos son gravísimos. Al margen de la enseñanza infantil, subraya Callón, en los casos "más positivos" el gallego no llega más allá "del 20%" del horario lectivo impartido en el país.
Ojo! No es dupli, que la otra noticia habla del mitin de Bilbao y este fue en A Coruña.
Dicho esto, ahí va la traducción al español:
Feijóo llena el mitin de A Coruña con cientos de buses llegados de toda Galicia
"PP. Bus número 48. Santa Comba". Y así hasta más de 150. El mitin central del PP en A Coruña se llenó en la tarde de este sábado con docenas de buses llegados de todos los puntos de Galicia. El acto de los conservadores, que se celebra en el Palacio de los Deportes de Riazor, obligó a cortar varios carriles de las carreteras que circunvalan el estadio de fútbol, debido a la enorme cantidad de vehículos que transportaron a millares de simpatizantes del Partido Popular llegados desde todo el país.
No hacía falta más que echar un vistazo a los autocares para enterarse de que el origen era de lo más variado, aunque principalmente de localidades de la provincia de A Coruña. Dodro, Santa Comba, Ferrol... Y así un montón de ayuntamientos con su respectivo cartel en el frontal de los buses que causaron un pequeño caos de tráfico en la zona de Riazor de la ciudad coruñesa. Los vehículos no fueron aparcados en zonas especialmente habilitadas, sino que quedaron situados en filas en los carriles que rodean el campo de fútbol y en algunas otras calles del barrio, lo que obligó a la Policía Local a regular el tráfico en los cruces.
Los millares de personas que bajaban de los buses, con un promedio de edad bien avanzada, contaban con el convite que el PPdeG exige para la mayoría de mítines de esta campaña. A La entrada, los asistentes se encontraron con una protesta de los trabajadores de Alcoa, que solicitaban soluciones ante la amenaza de cierre de la factoría y que estaban vigilados por un importante despliegue policial.
Rajoy, 'de bares' por la montaña luguesa sin Feijóo
Como en 2009, el PP decidió duplicar su campaña: por una parte Feijóo y por la otra Mariano Rajoy, aunque esta vez con la salvedad de que la presencia del actual presidente del Gobierno central no es especialmente cómoda para el aspirante a la reelección en la Xunta. Así, mientras el candidato se daba un baño de multitudes en A Coruña, Rajoy recorrió varias villas de la provincia de Lugo, comenzando por Guitiriz, donde el inicialmente previsto paseo por el centro de la localidad fue reemplazado por un acto en un balneario próximo para así evitar posibles protestas o muestras de rechazo.
Tras el ligero percance de Guitiriz, el jefe del Gobierno de España se trasladó a la montaña, en un periplo que incluyó, entre otros actos, el paso por un bar en Baralla y un mitin en As Nogais, en uno de esos actos donde el líder conservador se muestra más relajado que ante los focos madrileños y los dirigentes locales se tornan especialmente locuaces. Así, el acto comenzaba con el parlamento del alcalde de As Nogais, Jesús Núñez "Rucho", que se afanó en describir un casi apocalíptico panorama correspondiente al mandato del bipartito "social-nacionalista" entre 2005 y 2009: "despilfarro y corrupción por todas partes", advirtió el regidor para instar al vecindario a votar el 21 de octubre; "todas las encuestas que veis no son reales", advierte.
Rajoy describe sus experiencias viajando de 'Piedrafita' a 'Villagarcía de Arosa'
Tras Rucho, fue el turno del secretario del partido en la provincia, José Manuel Balseiro, orgullosos de haberle "fastidiado tres alcaldías al PSOE" en la zona en las pasadas municipales y, a continuación, para el presidente provincial y portavoz en el Senado, José Manuel Barreiro, que entre las risas de Rajoy ofreció una particular descripción de las demás fuerzas políticas, como "el Bloque tradicional", "el Bloque de Beiras", o "la señora a la que no le gusta que la llamen comunista", en referencia a la número dos de Alternativa Galega de Esquerda y líder de Esquerda Unida, Yolanda Díaz.
En este ambiente fue en el que intervino Rajoy, que combinó la llamada al voto para el ausente Alberto Núñez Feijóo con el recuerdo de su juventud, cuando estudiaba en León y, para ir "a Villagarcía de Arosa" tenía "que hacer noche en Lugo" por el mal estado de la carretera en lugares como "Piedrafita", donde "si uno encontraba un camión, tenía que ir en primera". Anécdotas automovilísticas al margen, Rajoy enfatizó la importancia del rural gallego y su evolución recordando, como ya había hecho en su debate de las generales ante Alfredo Pérez Rubalcaba, que "yo inauguré la luz eléctrica, yo, a principios de los 80 en algunas parroquias" de Pontevedra, donde presidía la diputación. En este contexto, Rajoy concluye: "En España sobra espectáculo, sobra exageración y radicalismo, en el fondo y en las formas" y por eso "lo que hace falta es lo que siempre aportó Galicia: moderación y sensatez". Y en esa Galicia "Feijóo merece la confianza otra vez de los gallegos" porque va a salir de la crisis de los primeros y si no, al tiempo", vaticina.