#2, cuando se empezó a ver el vandalismo contra las bicis de alquiler en Sevilla, se pensó mucho en los canis. Al final se descubrió que había más de un taxista resentido entre los vándalos.
Y si... los encapuchados... ¿fueran directivos de la fábrica de autobuses? ¡Eso lo cambiaría todo!
Es que el autobús es un elemento fundamental del aparato represor del estado y hay que hacerlo desaparecer.
Ains, cuanta energía desperdiciada, y la pasta que nos gastamos en reponer material urbano.