#1 Por cada bombardeo, un boicot.
Es uno de los pocos medios que la población de a pie tenemos para ejercer presión.
#2 En mi ciudad el Ayuntamiento se ha pasado años mirando para otro lado (cuando gobernaba el PSOE, y ahora que gobierna el PP desde hace más de 10 años).
Lo más que ha hecho es imponer sanciones por asuntos menores a los locales esporádicamente, y un par de sanciones "durillas" a los locales que no pertenecían a ningún "oligarca".
En resumen, que en este caso el Ayuntamiento sí es responsable de no hacer el papel que tiene encomendado.
Desde hace un tiempo están empezando a salir sentencias sobre los ruidos que generan ciertos establecimientos y que no permiten disfrutar del derecho al descanso que todo trabajador debería poder disfrutar en su casa.
Parece que al fin la Justicia empieza a sentar jurisprudencia a favor de los vecinos que llevan peleando tantos años.
#12 Erróneo, en la noticia pone que canjea los pisos por la mitad de la deuda.
Si Galileo levantara la cabeza y viera que tantos siglos después defender el método científico todavía es atacado desde la "fe"...
#3 Los españoles no hacemos esto por regla general, cierto, pero si hay quien se atreve a hacer estas barbaridades en nuestras calles es porque la reacción general no es la que debería ser, es decir, llamar a la policía, recriminarles su actitud o lo que sea menester menos el silencio.
#42 El problema de la publicidad no es algo estético, sino mucho más profundo.
Lee "No logo" de Naomi Klein si mi comentario te interesa
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#8 Más que una majadería me parece una política directa contra el acceso a la cultura.
¿Por qué no querrán que leamos?
Esto es otra prueba ineludible de que el objetivo de Israel no es acabar con los ataques de la diezmada Hamás, sino que simplemente utilizan sus condenables ataques (de Hamás) para llevar a cabo un GENOCIDIO puro y duro.