Este golpe palaciego contra Casado no llega porque el líder del partido esté incumpliendo desde hace tres años la Constitución, con su bloqueo a la renovación del Poder Judicial. Tampoco por ese comportamiento antipatriótico con el que Casado ha intentado boicotear la llegada a España de los fondos europeos. Ni por su máster regalado. Ni por las enormes dudas sobre sus títulos académicos. Todo eso el PP se lo perdonó. Este golpe palaciego tiene otro fondo y otra última causa que ha desencadenado este final: la ruptura de la omertá.
La localidad tailandesa de Pattaya es considerada el gran destino del turismo sexual en el mundo. Allí el sexo sin control no se escondía, más bien se celebraba. Las farmacias solo anunciaban Viagra y las clínicas ofertaban tratamientos contra las venéreas. Hoteles de lujo a precios de derribo, clima tropical junto a la playa y, según cifras oficiales, más de 27.000 prostitutas. Eso es una de cada cinco personas en la ciudad; o, más bien, era. En la «Gomorra de Tailandia» lo que ahora florecen son el polvo y las persianas cerradas.
La historia de Ucrania está marcada por una geografía relativamente llana, con excepción de los Cárpatos, y vertebrada por ríos navegables. Un paisaje amplio y expuesto a influencias y a posibles invasiones, como si la actual crisis solo fuera el último eslabón de una larga cadena histórica. Una de las tragedias del país más grande de Europa después de Rusia, que ha pasado por manos tártaras, lituanas, polacas y rusas, es su dramática exposición al mundo.
El Gobierno ha anunciado este miércoles un incremento del salario mínimo hasta los 1.000 euros en 14 pagas con efectos retroactivos a 1 de enero, en consonancia con los reclamos de los sindicatos pero con el rechazo de la patronal. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha plasmado el acuerdo con una firma pública con los sindicatos.
El caso de Chanel ha escamado al público porque representa el camino inverso al del cantautor: la discográfica invirtió 20000€, encargó la composición de una canción pegadiza –un bopazo– a cinco productores de proyección internacional, diseñó una coreografía al nivel de BTS y Jennifer López e hizo un casting para encontrar a una intérprete. «Políticamente, al RTVE actual le compensaba Ay mamá o Terra, pero la industria se habría resentido», asegura el manager Josep Silva. «El resumen es: "Es el negocio, amigos"».