Hace 2 años | Por Ddb a lavanguardia.com
Publicado hace 2 años por Ddb a lavanguardia.com

Nadia Ghulam, de 36 años, es una mujer hermosa, a pesar de las cicatrices. Su rostro es una metáfora de Afganistán, el país de las mil guerras . Vive en Badalona, donde trabaja como educadora social. Habla un castellano y un catalán perfectos, con la dulzura de los poetas persas que estudió en la escuela (“Tengo para ti una sorpresa / ha llegado la primavera”). La república de Gilead le hace retroceder a un aciago día de 1991.

Comentarios

O

#9 yo no he estudiado biología Marina y se distinguir entre una ballena y un caballito de mar.
Por si no lo has entendido, el resumen es que algunas cosas son tan evidentes que no hace falta ser "lisensiado" para darse cuenta

RobertNeville

#11 Sí, los ignorantes suelen considerar que la mayoría de problemas son de solución evidente.

O

#12 bueno, eso ya es problema de los ignorantes. Hablalo con ellos.

RobertNeville

#14 Háblalo lleva tilde.

Es esdrújula y tal.

O

#16 vaya, y eso lo sabes sin ser lingüista! Que curioso, me recuerda a un meneante que sin ser psicólogo te ha analizado al dedillo.

RobertNeville

#17 Sí. No hace falta ser licenciado en lengua y literatura española para escribir bien. Basta con haber ido al colegio.

"Que" lleva tilde cuando se utiliza para introducir oraciones exclamativas. Parece que no aprovechaste demasiado bien los años de formación primaria.

Los ignorantes también son muy generosos con sus autodiagnósticos.

O

#19 bueno, depende de lo que usted considere aprovechar bien la formación primaria. Para escribir una novela o descubrir la vacuna contra el vih no me vale. Para tener una vida medianamente decente viniendo de la pobreza, un trabajo medianamente bien pagado y con la seguridad de que no me van a despedir jamás, me ha servido. Para saber que tienes ciertos problemas psicológicos por el dolor de tu polla herida también me ha servido. Se puede decir que tengo los conocimientos justos para pasar el día.
Si, es una charla intrascendente pero quiero escribir cuantas más palabras mejor para que me corrijas, mientras te tenga aquí subsanando mis errores no estas por ahí dando pena con tu herido pene al aire.

RobertNeville

#21 No sé en qué momento he dado a entender que me interesaban tu vida y obras.

Mis disculpas.

O

#22 vaya, tan bien se te da la ortografía como mal se te da la comprensión lectora. Te doy una pista, lee la parte donde hablo de que es charla intrascendente para que no vayas por ahí dando pena con tu pene herido al aire. De nada

Edito, mi vida no te importa, pero a esto fijo que contestas, si no tienes la ultima palabra te da algo

RobertNeville

#24 Venga, al ignore, que ya cansas.

D

Ahora querrán que EEUU se quede...que cosas.

D

Nos llevamos las manos a la cabeza porque en Afganistán las mujeres llevan velo, pero ahora ves velos en España y quién sino la izquierda progre y las feministas lo apoyan.

He oído decir a las feministas que el burka se lo ponen por decisión propia y que es parecido a una tribu urbana

D

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D

#1 https://termbin.com/uq19


Habla una afgana: “Vivimos con
pánico”

Vuelco en Afganistán

La historia de Nadia Ghulam, que vivió
durante diez años como un hombre para
poder llevar pan a casa

Afganistán | La UE debate hoy la
respuesta a la llegada de refugiados,
en directo

Nadia Ghulam, escritora, refugiada
Afgana en Badalona Foto Ana Jiménez

Nadia Ghulam Ana Jimenez

Domingo Marchena Ana Jiménez
(Fotos)

Badalona 18/08/2021 06:00Actualizado
a 18/08/2021 08:51

Nadia Ghulam, de 36 años, es
una mujer hermosa, a pesar de
las cicatrices. Su rostro es
una metáfora de Afganistán,
el país de las mil guerras
. Vive en Badalona, donde trabaja
como educadora social. Habla un
castellano y un catalán perfectos,
con la dulzura de los poetas persas
que estudió en la escuela (“Tengo
para ti una sorpresa / ha llegado
la primavera”). La república
de Gilead le hace retroceder a un
aciago día de 1991.

Tendría unos 8 años. Una bomba
destruyó su casa en Kabul e
incendió su cuerpo. Su madre se
arrojó sobre ella para apagar las
llamas, sin reparar en que ella
también ardía. Cuando la sacó de
entre las ruinas humeantes, comenzó
a gritar: “¡Nadia, Nadia,
Nadia!”. Fue la última vez que la
llamó así en público. Cuando los
Ghulam volvieron a tener una casa,
Nadia se convirtió en Zelmai, el
hombre de la familia. [INS: :INS]
[INS: :INS] Nadia Ghulam, escritora,
refugiada Afgana en Badalona Foto
Ana Jiménez

Educadora y escritora Ana Jiménez

Su madre le llama todavía hoy hijo
cuando logran hablar por teléfono.
En el país de los mismos talibanes
que ahora se han hecho con el poder,
aquella niña tuvo que adoptar la
identidad de su difunto hermano
mayor, Zelmai, asesinado durante
la guerra. Lo hizo porque su padre
había enloquecido y ni su madre ni
sus dos hermanas pequeñas podían
trabajar porque eso es un sacrilegio
para los integristas religiosos que
interpretan el Corán con un AK-47.

Estuvo seis meses en coma y
dos años hospitalizada. Se ha
sometido a 20 operaciones, las
últimas siete en Catalunya. Aún
con llagas y dolores, se disfrazó
de chico para llevar pan a casa,
el delicioso naan afgano, plano,
esponjoso y aromático. En el 2006
llegó a Catalunya para reponerse
de las secuelas de sus heridas,
gracias a una oenegé. “Llevo 15
años trabajando día y noche para
ayudar a mi familia, pero cómo
hacer llegar la ayuda a un país
destrozado y cerrado”. [INS:
:INS] Lee también

"Nadie empleaba a una chica y me hice
pasar por chico"

Víctor-M. Amela Nadia Ghulam

Su mirada solo se ilumina cuando
habla de sus padres adoptivos,
Maria y Josep, de 70 y 73
años, psicóloga y médico ya
jubilados. Él se recupera de un
ictus. Anteayer Radio Caracol,
de Colombia, la entrevistó en
directo. En plena conversación,
su padre se cayó y en antena se la
escuchó gritar y colgar de forma
abrupta. Ahora la prensa se ha
acordado de ella y la llama a todas
horas, pero lleva 15 años clamando
en el desierto.

El otro día pidió perdón en
casa. “No son seres humanos: son
ángeles. A veces tengo que tocar a
mis padres para convencerme de que
son reales. ‘¿Perdón? ¿Por
qué?, me preguntaron. Porque
vosotros sí me escucháis día y
noche desde hace 15 años y siempre
son noticias tristes”. Y ellos,
que tienen tres hijos más, dijeron:
“Te queremos con tu pena y tu
dolor”.

Una oenegé y cuatro libros

Jenny Nordberg explica en Las niñas
clandestinas de Kabul (Capitán
Swing) que miles de niñas afganas
se hacen pasar por niños para poder
respirar. Una de aquellas niñas,
Nadia Ghulam, ha creado la oenegé
Ponts per la Pau para enviar ayudas
directas al país. Nadia también
es coautora de cuatro libros: El
secreto de mi turbante (Booket, en
castellano; Labutxaca, en catalán),
coescrito junto a Agnès Rotger;
La primera estrella de la noche
(Plaza&Janés y Rosa dels Vents),
con Javier Diéguez; y Cuentos
que me curaron (Columna), con
Joan Soler. El 23 de septiembre
saldrá a la venta su nueva obra,
un cuento para niños y adultos,
de La Galera e ilustrado por Mona
Brunet. Su título es revelador:
El país de los pájaros sin alas.
[INS: :INS]

El Gobierno le ofreció la
posibilidad de traerse a algún
familiar y ella se lo propuso a su
primera madre (a la que recuerda
oliendo “a especias, cebolla,
tomate y perejil fresco”),
pero ella se opuso: “Yo no
puedo ni andar. ¿Qué haría tan
lejos? Llévate a alguien con más
futuro”. El día de la bomba,
Nadia la seguía a la cocina porque
quería saber dónde escondía las
pastas del té. “No, tú espérame
aquí”. Y aquí fue el lugar donde
cayó la bomba.

Ha coescrito novelas y ensayos
para que conozcamos su historia, ha
inspirado una obra de teatro ( Nadia
), ha impartido charlas en infinidad
de escuelas y ha denunciado que
España es uno de los países que ha
exportado a Afganistán lo único
que no necesita: armas. Y nada.
Vuelve la guerra a un país que
siempre ha estado en guerra y todos
los periodistas del mundo quieren
hablar con ella.

La oenegé Ponts per la Pau

IBAN: ES36 2100 0005 9502 0146 4315

“Lo que está pasando no es
nuevo. Yo ya he vivido este
desgarro. Me preguntas mi edad y
yo solo puedo hablar de fechas de
forma aproximada. Calculo que tengo
36 años, pero no lo sé seguro. Eso
es lo que consta en mi pasaporte,
pero millones de afganos ignoran el
día exacto de nacimiento. ¿Por
qué? Porque cuando vives en un
país donde no sabes qué va a pasar
en la próxima hora no te preocupa
lo que pasó hace un año”.
[INS: :INS]

Durante la guerra civil, las normas
cambiaban de un día para otro.
Cuando los talibanes decidieron que
las mujeres no podían trabajar,
pensó que los señores del Corán
y de los kaláshnikov se darían
cuenta muy pronto de que así
condenaban a una legión de viudas
y de niñas huérfanas. “Pero un
día me vestí de chico para salir
a por pan y ese día duró diez
años”. Nadia Ghulam, escritora,
refugiada Afgana en Badalona Foto
Ana Jiménez

Durante la entrevista Ana Jimenez

–¿Tuviste miedo alguna vez?

–¿Alguna vez? En Afganistán
vivimos cada segundo de nuestras
vidas con pánico.

“Nadie está seguro. Las mujeres,
en especial las que no tienen un
hombre en casa. Pero también los
hombres corren peligro. Se llevan
a los jóvenes para adoctrinarlos
y engrosar sus filas. No, nadie
está seguro. Ni las plantas ni
los animales. Convertirán el país
en un desierto. Entre la paz y la
libertad, los afganos han elegido
la paz, pero qué paz puede haber
en un país con todo el mundo
armado. Pronto habrá una guerra
civil”.

La casa

Las niñas seguirán disfrazándose
de hombres, un fenómeno corriente
en Afganistán. Las doctoras dirán
que van a visitar a sus amigas,
no a pasar consulta. Y las maestras
valientes darán clases clandestinas
en sótanos. “Nos volverán a
destruir la casa, hijo mío ”,
le dijo su madre la última vez que
pudo hablar con ella. “La casa no
importa. Tú, sí. Si estás viva,
podrás ver cómo construimos otra,
mamá”.

(La entrevista tuvo lugar en el
patio de la granja Can Martri,
en la calle Francesc Layret de
Badalona. Cinco mujeres conversaban
animosamente en otra mesa. Enseguida
se hizo el silencio. La fotógrafa
y el periodista creyeron que
se habían ido. Pero no. Allí
seguían, llorando y pendientes de
las palabras de Nadia.)

RobertNeville

#13 El día en que la Montero diga algo con sentido prometo regalarte un ejemplar.

xalabin

#15 Es tristísimo que tú propia obra literaria esté supeditada a los espurios intereses de una tercera parte, es una merma para todo el mundo de la literatura. Desde aquí cuentas con todo mi apoyo y doble ración de corazones ❤ ️ ❤ ️

RobertNeville

#18 No es lo mismo espurio que espúreo.

;-))))))))

fofito

#20 No dice eso la RAE

xalabin

#20 Cosas del diccionario del móvil, no lo dude por mucho corazón que le ponga en los mensajes lol

RobertNeville

Muy triste, pero lo realmente importante es que nos ocupemos en España de que los niñes y las hijes no sufran discriminación por no pertenecer a un género binario.

x

#4 Se titulará: tribulaciones de una polla herida y sus lloros.

RobertNeville

#4 En realidad no es nada duro.

Disfruto escribiendo lo que me apetece y despreciando a los que les molesta lo que escribo.

xalabin

#10 Mi eterna admiración, avisa cuando ya esté impreso y podamos ir a que nos lo firmes. ❤ ️

F

#2 Algo no te funciona bien en la cabeza cuando después de leer esta historia sueltas semejante patochada.

RobertNeville

#7 Algo me dice que no tienes los 6 años de Medicina y los 5 de especialidad en Psiquiatría.

Por tanto, me paso por el arco del triunfo tus diagnósticos sobre mi salud mental.

A pastar.