En este vídeo el autor se abre camino a través de una red de estafadores con bombas de purpurina y explica cómo funcionan las estafas telefónicas y como hacen para mover el dinero entre la víctima y los responsables
#14:
#7 Ah, querido interlocutor, permíteme entonar la epopeya digital de este moderno Prometeo, un ingeniero mecánico quien, a través de la plataforma de YouTube, se dedica a desentrañar los misterios mecánicos que yacen en los recónditos rincones de nuestro mundo hiperconectado. Su ars poética, por así decirlo, se inclina hacia la invención de artilugios tan fascinantes como perturbadores, destinados a navegar los intricados laberintos de, pongamos por caso, los salones de juegos electrónicos y otras moradas de curiosidad tecnológica.
En el episodio más reciente de su odisea digital, este alquimista de la era de la información se embarca en una cruzada quijotesca contra los estafadores contemporáneos, aquellos charlatanes de la red que operan en la sombría periferia de la legalidad. ¿Y cómo lo hace, te preguntarás? Bueno, su modus operandi es tan brillante como una estrella fugaz cruzando el cielo nocturno de un mundo en descomposición: envía bombas de purpurina, sí, pequeños artefactos explosivos llenos de destellos cósmicos, a estos villanos de la era digital.
Ahora, imagina un escenario digno de una novela de espionaje de alto riesgo. La víctima, engatusada por las dulces palabras del estafador, envía su tesoro monetario a una dirección que, más a menudo que no, resulta ser una suerte de refugio temporal, ya sea un hotel en la lujosa Riviera o un Airbnb en alguna ciudad sin nombre. Entonces, una "mula" —un mensajero del inframundo digital— recoge el paquete en cuestión, sin necesidad de presentar credenciales ni documentos. Este individuo, un mero peón en este tablero de ajedrez siniestro, entrega el paquete a su supervisor, el maestro titiritero que tira de las cuerdas en esta danza macabra.
El supervisor, en un acto final de traición, paga a la mula su salario en monedas manchadas por el pecado, antes de transferir el resto del botín al estafador, el verdadero Moriarty en esta trama retorcida. Ah, pero aquí es donde nuestro héroe youtuber interviene, enviando su bomba de purpurina para estallar en un carnaval de justicia brillante, dejando a todos los implicados bañados en un polvo resplandeciente que no sólo mancha sus ropas, sino también sus almas oscuras.
Así, el universo virtual y el real se entrelazan en una danza surrealista, como si Salvador Dalí y Alan Turing hubieran colaborado en una obra de arte que desafía tanto la lógica como la estética. ¿Lo captas ahora, mi querido amigo?
#1:
Vídeo con el que me encontré y que ha resultado ser bastante más interesante de lo que pensaba.
Como no me gustan mucho los vídeos os cuento un poco lo que se ve.
Este youtuber es ingeniero mecánico y se dedica a hacer inventos un poco raros para situaciones en las que explica cómo funcionan determinadas cosas como por ejemplo los salones de juegos.
En este caso, se dedica a enviar bombas de purpurina a estafadores y en este vídeo cuenta que cuando captan a una víctima, esta envía el dinero por paquetería a una dirección, que normalmente es un hotel o un Airbnb.
Una mula va a recoger ese paquete a la puerta, sin estar necesariamente registrada, y a darlo a un supervisor, que es quien le paga y va a comisión con el estafador real, al que transfiere el dinero
#7 Ah, querido interlocutor, permíteme entonar la epopeya digital de este moderno Prometeo, un ingeniero mecánico quien, a través de la plataforma de YouTube, se dedica a desentrañar los misterios mecánicos que yacen en los recónditos rincones de nuestro mundo hiperconectado. Su ars poética, por así decirlo, se inclina hacia la invención de artilugios tan fascinantes como perturbadores, destinados a navegar los intricados laberintos de, pongamos por caso, los salones de juegos electrónicos y otras moradas de curiosidad tecnológica.
En el episodio más reciente de su odisea digital, este alquimista de la era de la información se embarca en una cruzada quijotesca contra los estafadores contemporáneos, aquellos charlatanes de la red que operan en la sombría periferia de la legalidad. ¿Y cómo lo hace, te preguntarás? Bueno, su modus operandi es tan brillante como una estrella fugaz cruzando el cielo nocturno de un mundo en descomposición: envía bombas de purpurina, sí, pequeños artefactos explosivos llenos de destellos cósmicos, a estos villanos de la era digital.
Ahora, imagina un escenario digno de una novela de espionaje de alto riesgo. La víctima, engatusada por las dulces palabras del estafador, envía su tesoro monetario a una dirección que, más a menudo que no, resulta ser una suerte de refugio temporal, ya sea un hotel en la lujosa Riviera o un Airbnb en alguna ciudad sin nombre. Entonces, una "mula" —un mensajero del inframundo digital— recoge el paquete en cuestión, sin necesidad de presentar credenciales ni documentos. Este individuo, un mero peón en este tablero de ajedrez siniestro, entrega el paquete a su supervisor, el maestro titiritero que tira de las cuerdas en esta danza macabra.
El supervisor, en un acto final de traición, paga a la mula su salario en monedas manchadas por el pecado, antes de transferir el resto del botín al estafador, el verdadero Moriarty en esta trama retorcida. Ah, pero aquí es donde nuestro héroe youtuber interviene, enviando su bomba de purpurina para estallar en un carnaval de justicia brillante, dejando a todos los implicados bañados en un polvo resplandeciente que no sólo mancha sus ropas, sino también sus almas oscuras.
Así, el universo virtual y el real se entrelazan en una danza surrealista, como si Salvador Dalí y Alan Turing hubieran colaborado en una obra de arte que desafía tanto la lógica como la estética. ¿Lo captas ahora, mi querido amigo?
Vídeo con el que me encontré y que ha resultado ser bastante más interesante de lo que pensaba.
Como no me gustan mucho los vídeos os cuento un poco lo que se ve.
Este youtuber es ingeniero mecánico y se dedica a hacer inventos un poco raros para situaciones en las que explica cómo funcionan determinadas cosas como por ejemplo los salones de juegos.
En este caso, se dedica a enviar bombas de purpurina a estafadores y en este vídeo cuenta que cuando captan a una víctima, esta envía el dinero por paquetería a una dirección, que normalmente es un hotel o un Airbnb.
Una mula va a recoger ese paquete a la puerta, sin estar necesariamente registrada, y a darlo a un supervisor, que es quien le paga y va a comisión con el estafador real, al que transfiere el dinero
#7 Es que la mecánica del timo es compleja, el youtuber o el doblador es histriónico como el que más pero merece la pena ver el video para saber como funciona toda esa perversa maquinaria de estafas que tienen montada y la de capas y de actores que hay en el tema.
#5 A saber donde estara enterrado pero si es un video de mark robers lo han subido, si o si. Tiene otro donde consigue activar una camara en un callcenter de "hola le llamamos de microsoft...." y les envia una bomba de cucarachas.
Comentarios
#7 Ah, querido interlocutor, permíteme entonar la epopeya digital de este moderno Prometeo, un ingeniero mecánico quien, a través de la plataforma de YouTube, se dedica a desentrañar los misterios mecánicos que yacen en los recónditos rincones de nuestro mundo hiperconectado. Su ars poética, por así decirlo, se inclina hacia la invención de artilugios tan fascinantes como perturbadores, destinados a navegar los intricados laberintos de, pongamos por caso, los salones de juegos electrónicos y otras moradas de curiosidad tecnológica.
En el episodio más reciente de su odisea digital, este alquimista de la era de la información se embarca en una cruzada quijotesca contra los estafadores contemporáneos, aquellos charlatanes de la red que operan en la sombría periferia de la legalidad. ¿Y cómo lo hace, te preguntarás? Bueno, su modus operandi es tan brillante como una estrella fugaz cruzando el cielo nocturno de un mundo en descomposición: envía bombas de purpurina, sí, pequeños artefactos explosivos llenos de destellos cósmicos, a estos villanos de la era digital.
Ahora, imagina un escenario digno de una novela de espionaje de alto riesgo. La víctima, engatusada por las dulces palabras del estafador, envía su tesoro monetario a una dirección que, más a menudo que no, resulta ser una suerte de refugio temporal, ya sea un hotel en la lujosa Riviera o un Airbnb en alguna ciudad sin nombre. Entonces, una "mula" —un mensajero del inframundo digital— recoge el paquete en cuestión, sin necesidad de presentar credenciales ni documentos. Este individuo, un mero peón en este tablero de ajedrez siniestro, entrega el paquete a su supervisor, el maestro titiritero que tira de las cuerdas en esta danza macabra.
El supervisor, en un acto final de traición, paga a la mula su salario en monedas manchadas por el pecado, antes de transferir el resto del botín al estafador, el verdadero Moriarty en esta trama retorcida. Ah, pero aquí es donde nuestro héroe youtuber interviene, enviando su bomba de purpurina para estallar en un carnaval de justicia brillante, dejando a todos los implicados bañados en un polvo resplandeciente que no sólo mancha sus ropas, sino también sus almas oscuras.
Así, el universo virtual y el real se entrelazan en una danza surrealista, como si Salvador Dalí y Alan Turing hubieran colaborado en una obra de arte que desafía tanto la lógica como la estética. ¿Lo captas ahora, mi querido amigo?
#14 Maravilla de comentario.
#14 a sus pies
#14 Caballero, me descubro ante usted.
Vídeo con el que me encontré y que ha resultado ser bastante más interesante de lo que pensaba.
Como no me gustan mucho los vídeos os cuento un poco lo que se ve.
Este youtuber es ingeniero mecánico y se dedica a hacer inventos un poco raros para situaciones en las que explica cómo funcionan determinadas cosas como por ejemplo los salones de juegos.
En este caso, se dedica a enviar bombas de purpurina a estafadores y en este vídeo cuenta que cuando captan a una víctima, esta envía el dinero por paquetería a una dirección, que normalmente es un hotel o un Airbnb.
Una mula va a recoger ese paquete a la puerta, sin estar necesariamente registrada, y a darlo a un supervisor, que es quien le paga y va a comisión con el estafador real, al que transfiere el dinero
#1 no me he enterado de nada, lo siento
#7 Es que la mecánica del timo es compleja, el youtuber o el doblador es histriónico como el que más pero merece la pena ver el video para saber como funciona toda esa perversa maquinaria de estafas que tienen montada y la de capas y de actores que hay en el tema.
#1 Muy interesante y que lástima dan las víctimas, van a por personas buenas y decentes. Vaya asco de timadores.
#1 El de los salones de juegos y el de las ferias son simpatiquísimos, pero el vídeo que más me ha gustado es el de Zipline en Ruanda.
#5 Ladrones de paquetes contra una bomba de purpurina [ENG]
Ladrones de paquetes contra una bomba de purpurina...
youtube.comHay varios
Una versión mejorada :
Bomba de purpurina 4.0 contra los ladrones de paquetes (Mark Rober) [ENG]
Bomba de purpurina 4.0 contra los ladrones de paqu...
youtube.com#6@admin ya no puedo descartar. ¿Serías tan amable?
#9 No tienes porque. Los videos de #6 son otros del mismo youtuber sobre robos de paquetes pero no de esta estafa.
#6 Estos son los clásicos de este tipo pero en este caso ha dado un gran salto.
No se trata de robos de paquetes sino de decenas de miles de dólares de personas ancianas y decentes. Un asco
#5 A saber donde estara enterrado pero si es un video de mark robers lo han subido, si o si. Tiene otro donde consigue activar una camara en un callcenter de "hola le llamamos de microsoft...." y les envia una bomba de cucarachas.
#8 supongo que porque se publica en varios idiomas
Si esto no ha salido ya, me extrañaría
#2 por una cosa que manda #0 desde hace meses déjale hacer hombre.
#3 Pq me da pereza buscarlo...
#4 Yo lo busqué y no encontré nada