Nevis tenía 24 años, un marido y tres hijos. Al conocer la noticia, su esposo la abandonó y se fue a vivir a Venezuela. Pero algo le decía a Nevis que no tenía ese virus. Por eso, además de luchar por sacar a adelante a sus hijos, empezó a informarse sobre el VIH, hasta que se dio cuenta de que sus síntomas no eran los que se describían para esa enfermedad. Se hizo varios análisis, costosos, que el año pasado finalmente le dieron esperanza: no tiene sida.
Comentarios
J*d*r con el marido: "No obstante me fui, porque creí lo que decía el examen que le hicieron"
Cuando mas falta le hacia su apoyo se va.
Pues algo bueno salió de todo esto, se deshizo de un grandioso gilipollas. Mejor ahora que nunca.
Que hombre más cobarde! #2 Por lo visto ha vuelto a vivir con ella, o sea que no se ha librado de él. Eso sí, ahora que sabe que no tiene sida.
Ahora empezará una nueva y mejor vida...
Si yo fuera el marido y estuviera seguro de no haber sido infiel, hubiera pensado que ello lo había sido, y eso es una causa razonable para dejar a la madre de tus hijos, no hay confianza posible, y poner en duda un diagnóstico médico resulta a veces impensable.
Lo peor de todo esto es el sufrimiento de esa mujer, y su incapacidad para acceder al sistema sanitario sin hipotecar su casa, si fuese en España el diagnóstico hubiese durado días, o como mucho meses, con la insistencia de la mujer en que no era posible y su derecho a recibir una segunda opinión... Y de paso no se hubiera provocado daños con medicamentos que no necesitaba... brutal.
Ahora que se haga las pruebas el tio, a saber lo que ha podido pillar por ahi...