Repasando esa maravilla del siglo VII escrita por San Isidoro de Sevilla, las Etimologías, considerada por muchos autores como la más interesante “enciclopedia” escrita en la Edad Media, he vuelto a encontrar un fragmento del Libro XVI que siempre me llamó la atención y que me recuerda ciertas historias intemporales.
#0 Entonces no existían las patentes ni se conocían las islas caribeñas. Tampoco se conocía el vidrio, y menos una nueva fórmula. Por otro lado el imperio romano nunca despreció los avances. Como anécdota o cuento está bien...pero no encaja.
#5 Pues yo si lo veo razonable. Los romanos ya conocian otras tecnicas de orfebrería. El imperio tenia mucho intereses puestos en oro y piedras preciosas. Seria peligroso si de la noche a la mañana no valiera nada.
Comentarios
Muy buen punto de vista.. me gusto.
Saludos.
Dios, que interesante historia.
El peligro son los tios que odian la innovación, casi siempre por oscuros intereses y otras veces por ignorancia supina.
#3 Mientras desarrollan su avanzadísima tecnología militar...
#0 Entonces no existían las patentes ni se conocían las islas caribeñas. Tampoco se conocía el vidrio, y menos una nueva fórmula. Por otro lado el imperio romano nunca despreció los avances. Como anécdota o cuento está bien...pero no encaja.
#5 Pues yo si lo veo razonable. Los romanos ya conocian otras tecnicas de orfebrería. El imperio tenia mucho intereses puestos en oro y piedras preciosas. Seria peligroso si de la noche a la mañana no valiera nada.
#5 ¿Como?
http://es.wikipedia.org/wiki/Vidrio_romano
http://www.google.es/search?q=vidrio+romano&ie=utf-8&oe=utf-8&aq=t&rls=org.mozilla:es-ES:official&client=firefox-a
Esta noticia es lo que és, una bonita y corta fábula.