El Seprona encontró el can enterrado y un veterinario certificó que la muerte había sido porque el animal había recibido reiterados golpes en la zona craneal, así como que la podenca estaba a punto de parir, se explica en un comunicado del instituto armado.
Comentarios
Y no tengamos más controlado esto de los animales de compañía.
Las muertes deben estar certificadas por un veterinario (precio no atado a especulaciones ni dumping) que debe retirar el chip.
Se debe obligar a los dueños a hacer revisiones trianuales de sus mascotas. Si declaran haberla perdido, deben interponer denuncia.
Investigar a aquellos que interpongan demasiadas denuncias de extravío de perro.
Controlar a aquellos colectivos que hacen uso profesional y de ocio con los perros (Cazadores, apostadores de galgos, etc...)
NO podemos evitar que un hijo de puta deje de serlo, la cosa es trincarlo.