Se prepara la abolición de la prostitución en España: lo que ocurrirá con las prostitutas

El ministro de la Presidencia Félix Bolaños esta semana:

Es un compromiso del presidente del Gobierno, es un compromiso del Gobierno: abolir la prostitución, porque al final no es más que la trata de mujeres. Y por tanto, en el objetivo de mejorar la dignidad de las mujeres, este colectivo de personas es especialmente sensible. Y como están especialmente desfavorecidos y tienen unas condiciones de vida especialmente malas, nosotros, el Gobierno de España, queremos protegerlas, y queremos abolir la prostitución para conseguir mayor dignidad en sus vidas.

1.     …nosotros, el Gobierno de España, queremos protegerlas, y queremos abolir la prostitución para conseguir mayor dignidad en sus vidas.

Resultado del estudio del Institute for Feminism & Human Rights de Gunilla Ekberg, que trabajó en el Ministerio de Industria como experta del gobierno sueco en prostitución y trata de seres humanos (Suecia fue el país pionero en abolir la prostitución en 1999):

Delitos denunciados: Trata de personas con fines sexuales:

 

Delitos denunciados: Proxenetismo y proxenetismo bruto

 

Delitos denunciados: Intento de compra o adquisición de un servicio sexual

 

Condenas

La pregunta que yo me hago es: ¿había más denuncias y condenas de este estilo antes del 99, el año en que se introdujo esta ley? Para ello contacté con RajRedlich, que me dijo lo siguiente:

No puede saberse. El delito de compra de sexo se introdujo con la Sexköpslagen en el 99, el delito de trata se introdujo incluso posteriormente 2002-2003. Antes del 99 no existían penalmente esas conductas.

Por lo tanto, que el lector valore si esta ascensión de delitos y condenas, con el paso del tiempo, suponen el éxito o no de la ley sueca.

En segundo lugar, cortesía de Raj Redlich, expongo al lector el siguiente estudio:

Primero, el modelo nórdico no reduce la demanda, el tráfico sexual, la violencia o la explotación. Más bien, actúa como una política irritante que exacerba estos mismos problemas. El modelo tampoco contribuye a la igualdad de género, porque la base de evidencia en la que se basa el enfoque de la política no reconoce investigaciones que muestran que las mujeres y las parejas pagan por sexo y que los hombres y las personas trans venden servicios sexuales

Este otro:

La investigación de Levy muestra que la visión estatal oficial de la prostitución resulta en parte en la provisión condicional de servicios y en la negativa a proporcionar condones e información de seguridad para las trabajadoras sexuales. Visto desde una perspectiva de salud, es especialmente problemático que la Unidad de Prostitución de Estocolmo y otros funcionarios presentados en el libro argumenten que proporcionar condones e información sobre cómo vender sexo de manera más segura podría alentar a las personas a comenzar a vender sexo o a permanecer en el trabajo sexual.
El estudio de Levy ilustra que las trabajadoras sexuales se ven claramente afectadas por un contexto social en el que prevalecen puntos de vista victimizantes y patologizantes sobre el trabajo sexual y las trabajadoras sexuales.
Además, la investigación de Levy contribuye a la discusión sobre cómo la criminalización del cliente afecta las condiciones laborales y la seguridad de las trabajadoras sexuales. Su investigación indica que las interacciones más apresuradas entre las trabajadoras sexuales y sus clientes, y el énfasis de los clientes en el anonimato y su negativa a llamar desde un número identificable, pueden representar un riesgo para la seguridad para trabajadoras sexuales. La investigación de Levy indica que el aumento de la competencia para asegurar clientes ha resultado en una mayor polarización de las trabajadoras sexuales. Hay indicios de que las trabajadoras de la calle y otros grupos más vulnerables, como las migrantes circulares, pueden verse obligadas a bajar sus precios, vender sexo sin protección o aceptar clientes poco confiables. Por otro lado, Levy argumenta que los “mejores” clientes que temen ser descubiertos, buscan trabajadoras sexuales suecas, blancas y profesionales, lo que significa que estas trabajadoras sexuales pueden exigir precios altos y prácticamente elegir a sus clientes.

Este otro:

En contraste con las afirmaciones de que las trabajadoras sexuales están protegidas de la repercusión legal y la interferencia autoritaria por el hecho de que solo el comprador de sexo es criminalizado, hay informes de que las trabajadoras sexuales experimentan dificultades con las autoridades, las fuerzas del orden y tienen dificultades adicionales con los servicios sociales y para obtener acceso a prestación de servicios, alimentada por los discursos que enmarcan la ley de compra de sexo.
Las trabajadoras sexuales parecen ser vistas tanto como víctimas pasivas (según el discurso que justifica la sexköpslagen) como, además, y en la línea de un 'estigma de puta', quizás más arraigado, como una molestia no deseada y desviada (ver también Doezema, 2010). El discurso feminista radical parece usarse para justificar (parcialmente) la legislación y las políticas que se utilizan para atacar y desestabilizar la vida de las mismas trabajadoras sexuales y desplazarlas del espacio público, además de atacar a sus clientes (sirviendo también para desestabilizar la vida de las trabajadoras sexuales).
Sin embargo, la afirmación citada anteriormente de que Suecia ha "resuelto" la prostitución ha sido cuestionada en este artículo. Cuestionamos esta afirmación en el contexto del fracaso de esta ley abolicionista (y las narrativas justificatorias de la ley) para lograr su objetivo de disminuir los niveles de trabajo sexual, y dados los resultados negativos sustanciales tanto de la legislación como del discurso sobre las realidades individuales vividas por muchos trabajadoras sexuales en Suecia.

Lo cierto es que hay muchísima evidencia científica disponible que Redlich recopila y que a la que el lector puede acceder en este hilo de Twitter, acerca del fracaso del modelo nórdico.

Por tanto, a la frase de Bolaños …nosotros, el Gobierno de España, queremos protegerlas, y queremos abolir la prostitución para conseguir mayor dignidad en sus vidas”, podríamos contestar con esta otra de Óscar Wilde:

A menudo, con las mejores intenciones se consiguen los peores efectos.

 

2.     Al final (la prostitución) no es más que la trata de mujeres

A esta cuestión ya respondí hace unos meses en un artículo que escribí que llegó a portada: El tabú de la prostitución (el mito del 80% es trata). Resumidamente, intenté demostrar que el mito que pulula por la sociedad de que casi toda la prostitución es trata, es eso: un mito, que no se fundamenta en ningún dato objetivo, sino en una simple repetición de una cifra que inició la política británica, Fiona Mactaggart, en una entrevista de radio y que provocó un gran revuelo en la época por la evidente manipulación:

(Comentario final del entrevistador)

Fiona MacTaggart, volvimos al informe del Ministerio del Interior “Paying the Price” al que se refería y no pudimos encontrar la cifra del 80% de prostitutas controladas por sus proxenetas, traficante o tratantes. Sí que encontramos la afirmación de que la trata tiene lugar a escala mucho menor que el tráfico ilegal de migrantes. También obtuvimos una declaración de la policía local que creía que el 70% de las prostitutas callejeras de Londres eran extranjeras. El Ministerio del Interior nos dijo que no avala ni usa la cifra de que el 80% de prostitutas estén controladas por otros.

Sin embargo, los políticos y los medios de comunicación, a pesar de no tener ninguna evidencia de esa cifra, tratan de implantarnos la idea de que el 80% es trata:

 

Según el Balance estadístico 2016-20 del Ministerio del Interior, el número de víctimas de trata sexual en España ha sido:

Y el número de víctimas de explotación sexual ha sido:

Si me gustaría añadir que el Ministerio del Interior, en un epígrafe, dicen lo siguiente:

Esto parece ser que son el número de prostitutas detectadas en las inspecciones administrativas (no el número de víctimas reales). Como curiosidad, @ExpertoIgualdad me pasa las siguientes capturas del informe del año 2017 y me advierte de algo que se me pasó por alto. La primera se refiere al estudio de la trata de actividad laboral:

Esta segunda al estudio de la trata de naturaleza sexual:

Podemos fijarnos que en la imagen de trata laboral, se habla de “Personas identificadas” en las inspecciones administrativas; mientras que en la imagen de trata sexual, se habla de “personas detectadas en SITUACIÓN DE RIESGO” en las inspecciones administrativas. Si os fijáis en las noticias y publicaciones sobre prostitución siempre veréis que juegan constantemente con el lenguaje para implantarnos inconscientemente la idea de que la prostitución es algo que está mal. No necesitan demostrarlo con datos, como yo estoy tratando de desmentir. ES NECESARIO que la población SIENTA que la prostitución es un cáncer.

Sea como sea la pregunta es: ¿cuántas prostitutas hay en España? Si acudimos a este informe del 2007 del Boletín Oficial de las Cortes Generales, podemos comprobar cómo la cifra estimada de prostitutas en nuestro país es de 400.000:

En nuestro país hay 15 millones de varones potenciales clientes de 400.000 prostitutas o una por cada 38 hombres.

Por otra parte, si acudimos a este otro informe del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, podemos observar cómo el Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CITCO) en su informe de situación de la “Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual” del año 2012, estima que el número de mujeres que se dedican a la prostitución es de 45.000:

En este sentido, el Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado (CITCO), en el informe de situación de la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual correspondiente a 2012, en base a la información policial recogida en los últimos años y con la perspectiva económica que genera la industria del sexo, realiza una estimación del número de mujeres en situación de prostitución en España, señalando que éste es de aproximadamente 45.000.

Sea como sea, si tiramos por lo bajo y asumimos la cifra de 45.000 prostitutas, el porcentaje de víctimas de trata y explotación sexual de la cifra de 575 víctimas que nos da el Ministerio del interior en su informe (la imagen de arriba) sería el 1,27%. No obstante, como dije en el anterior artículo, según Redlich, en Europa una cifra más cercana sería del 14% en base a estimaciones. Como él mismo me dice:

Viene del primer informe donde se utilizó captura-recaptura para estimar la tasa de detección. UNODC 2010

Además, según Redlich, la cifra más aproximada de prostitutas en España es entre 100.000 y 150.000. Para ello me cita este estudio:

…a través de un estudio económico, calculan que el número de mujeres prostitutas en España oscila entre las 100.000 y las 150.000.

Y este otro:

Es más, si realmente el 80% de la prostitución fuese trata, eso hablaría muy mal de los cuerpos de seguridad del Estado. Es decir, de 36.000 u 80.000 víctimas que estarían siendo tratadas al año, los cuerpos de seguridad tan solo serían capaces de liberar a 575. ¿Y qué pasa con el resto?

No hay ninguna evidencia de que el 80% de la prostitución sea trata, es más, sí hay evidencias de que el número es bastante más pequeño, probablemente en torno al 14%.

Por tanto, a la frase de Bolaños de “al final (la prostitución) no es más que la trata de mujeres” podríamos decir que esto no es más que una táctica propagandística donde:

Si una mentira se repite mil veces, se convierte en verdad.

Y como decía Alfred Adler:

Una mentira no tendría sentido si la verdad no fuera percibida como peligrosa.

 

3.    …en el objetivo de mejorar la dignidad de las mujeres.

En este vídeo, la trabajadora sexual sueca, Pye Jacbsson, nos comenta lo siguiente:

La población sueca es TAN CONSCIENTE de que (…) todas las mujeres en el trabajo sexual son víctimas… así que ahora, si sospechan que un vecino está vendiendo sexo, son como “buenos ciudadanos”. “Llamen a la policía y dígaselo”, ya sabes… Lo que significa que la mujer perderá su apartamento porque el propietario está obligado a echarla, de lo contrario, lo acusarán de proxenetismo.
Si insistes en trabajar e insistes en seguir haciendo esto, entonces eres como “mala” y serás castigada. (Parodia a un político) “Sabes que queremos salvarte. ¿No entiendes? Queremos salvarte”. Y sabes que si no lo aprecias serás castigada de una forma u otra.
También si dos mujeres eligen trabajar juntas en un apartamento, incluso si una no está tomando dinero de la otra, solo el hecho de que una no tiene que pagar el alquiler sola, serán tildadas de proxenetas la una de la otra, lo que significa que las mujeres no trabajan solas, lo que, por supuesto, es más inseguro.
Especialmente para las mujeres de la calle esto ha sido muy malo porque antes hacían el clásico de apoyarse en la ventanilla del coche para tener la negociación (“esto es lo que estoy dispuesta a vender, esto es lo que estoy dispuesta a hacer…), ya no tienen tiempo porque los clientes están tan nerviosos que directamente tienen que subirse al auto, conducen y luego negocian.
También, el buen cliente, que significa el cliente seguro (no el cliente peligroso), piensan que es cierto que el riesgo de ser atrapados es mayor en las calles, lo que significa que cambian a contratar trabajadoras internas, incluso si prefieren comprar sexo a trabajadoras externas, lo que deja a las trabajadoras externas con los malos clientes, con clientes peligrosos que antes tenían la oportunidad de rechazar, pero ahora no pueden permitírselo, porque muchos de los buenos clientes se han ido.
Hay personas que tú sabes que están siendo abusadas, hay sufrimiento, incluso hay víctimas de trata, etc. La forma habitual de la policía para descubrir esto no es de las trabajadoras sexuales, sino de los clientes (…) y claro ahora ya no llaman a la policía porque si llaman los acusarían de un delito.

El cartel de la entrevista dice: “¿Redujo la ley el trabajo sexual desde 1999?”. Dice Pye Jacbsson:

Si hablas con la policía no dirán que realmente lo redujo porque (…) no hay números antes de la ley, los únicos números que tienen se basan en la prostitución callejera. En la prostitución callejera en Suecia los números siempre han sido muy bajos porque hace frío, no queremos estar en la calle.

Conclusión

Estas leyes no van a mejorar la vida de las prostitutas, tan solo las de los políticos, que, desde la más alta cumbre moral, presumen de ser los más preocupados por las vidas de las trabajadoras sexuales, pero, a su vez, paradójicamente, obvian toda aquella información que contradiga sus expectativas, generando, por tanto, un empeoramiento de la vida de muchas trabajadoras además de una criminalización injusta de muchos clientes. Cuando se implanten estas leyes el lector podrá ver con sus propios ojos, cómo sus defensores, en un autoengaño inconsciente, seguirán obviando los datos que van en su contra y harán malabarismos argumentales para vender el relato que les interesa vender en lugar de asumir la realidad de que la prostitución no es algo, per se, maligno, y que no toda prostituta es una víctima que hay que salvar, ni todo cliente es un violador en potencia.

Piense el lector en las diferentes épocas de la historia. ¿Acaso no fue la prostitución (casi) siempre algo problemático? ¿Acaso no han intentado las diferentes sociedades y sus respectivas religiones, en mayor o menor medida, ejercer un control sobre la sexualidad? Quizás debamos empezar a pensar que esto que está aconteciendo hoy en día no es más que la misma moralidad de siempre con un envoltorio distinto. Nada más.