La palabra pazo es la evolución en gallego del vocablo latino palatium, que en castellano dio lugar a palacio. Estos palacios o casas señoriales que hoy perduran componen una de las señas de identidad de Galicia y destacan, además de por su arquitectura pétrea y solariega, por los terrenos que los rodean, plantaciones de vides, huertos y jardines, siempre verdes, frondosos, exuberantes, gracias a un clima que los convierte en algo único. Aquí hemos seleccionado algunos de los muchos y bellos pazos gallegos, que destacan por sus jardines.
Comentarios
Aquí hay algunos más: Un viaje a la Galicia histórica más lujosa a través de los encantos de diez pazos gallegos únicos
Lástima del entorno. En los 8 casos, están inmersos en un mar de eucaliptos.