Conocemos al hombre que no va corriendo al supermercado para hacer sus compras, gracias a su diminuto huerto urbano que le ha mantenido con frutas y verduras durante nueve meses. Se puso manos a la obra para transformar la mitad del patio de 8×5 metros en un huerto urbano, montó un enrejado de pared para las plantas con botellas de agua recicladas e instaló jardineras y un invernadero. Historias que inspiran