Así parece que tiene que titularse una noticia sobre los actuales abusos policiales en los EE.UU. para llamar la atención del mundo. La gran prensa ha silenciado lo que ocurre en ese país; y a nadie se le esconde que, si fuese en Venezuela, con bombos y platillos el escándalo habría llegado a Marte. No es la misma: Un policía de Seattle le echa pimienta en espray en la cara a un profesor por andar demasiado cerca