La Guardia Civil ha detenido al propietario de una granja tras encontrar en su interior 21 vacas muertas de sed y hambre y otras 21 en estado de inanición. Las vacas muertas estaban mezcladas con los excrementos de las cuadras. El detenido está acusado un delito de maltrato y abandono animal junto a otro contra la protección de la flora y la fauna.