En Rusia, un acto tan tan banal como salir al balcón a apurar un pitillo puede costarle a uno muy caro a partir del próximo 1 de octubre. El Ministerio para las Situaciones de Emergencia acaba de hacer pública una nueva normativa antiincendio que incluye la prohibición de emplear cualquier forma de fuego en las terrazas y palcos. Inicialmente se pensó que la medida afectaba solo a barbacoas o candelabros, aunque luego se especificó, ante la estupefacción de muchos, que también incluía a los cigarrillos y las cerillas.
Comentarios
Que el Ministerio para las Situaciones de Emergencia no haya prohibido ninguna otra actividad en los balcones me lleva a pensar que el turismo inglés en Rusia es poco significativo.
Los balcones son lo más peligroso del mundo, los carga el diablo y sino que se lo pregunten a todos los bretones que la han palmado intentando saltar de uno de ellos...
Es legal coger un camión, encender el motor y quemar litros de gasolina, aunque sea aparcado; pero no fumarse un pitillo, no sea que mates a alguien.
Se ve que los fumadores rusos también son de tirar la colilla encendida en cualquier sitio