El acuerdo alcanzado esta mañana en la Sección Primera de la Audiencia contempla que cumplirá 15 años y el resto se sustituye por la expulsión del país. El acusado, de origen marroquí, se ha declarado insolvente, por lo que no hará frente a los 300.000 euros de indemnización a los que ha sido condenado. Se le ha aplicado las agravantes de alevosía y ensañamiento y la atenuante de alteración psíquica.