Alberto Roth decidió cambiar las botas de fútbol por la pala de pádel. Después de jugar en el Alavés y en el Espanyol de Javier Clemente, se hizo cargo de la Federación Alavesa de pádel. Llegó hace once años y ha vivido afortunadamente la época de expansión y crecimiento local y nacional. Ahora intenta que Vitoria no se quede atrás a nivel autonómico en un deporte en el que «el componente social ha sido crucial».