Hace 11 años | Por --303142-- a blogs.elpais.com
Publicado hace 11 años por --303142-- a blogs.elpais.com

Pero en la víspera ya impresionaron cuando, nada más llegar a A Coruña (el partido se disputaba en Riazor), con bastante retraso (venían de Bulgaria, vía Madrid, y tuvieron que aterrizar en Vigo por la lluvia en Lavacolla), lo primero que hicieron fue pedir un campo en el que entrenarse y, sin subir a las habitaciones ni nada, fueron, cada cual con su bolsita y repartidos en varios taxis, al campo municipal de Santa Isabel. Gente extraña, pensaron los nuestros. Entonces, el hábito aquí era un paseíto la víspera del partido. Nada de entrenarse.