Los vehículos municipales de Alcorcón incumplen las normas de tráfico impunemente mientras los ciudadanos ven cómo se limitan día a día los lugares donde pueden aparcar. Enrique Cascallana y el PSOE de Alcorcón demuestran nuevamente su talante autoritario y gobiernan la ciudad como si de un cortijo se tratase. Las normas son para todos o no son normas.
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