Canónical la empresa que hay detrás de Ubuntu acaba el 2008 con más de 200 empleados a tiempo completo y unos ingresos de 30 millones de dólares. De éste modo el proyecto Ubuntu se convierte en algo autosostenible, según Shuttleworth, ya que hasta ahora dependía mayormente de las aportaciones personales del multimillonario. “Un sistema operativo libre que se paga a sí mismo”, dice Shuttleworth. Original:
www.nytimes.com/2009/01/11/business/11ubuntu.html?_r=1