Los indicadores preservados de la dieta de los dinosaurios son extremadamente raros en el registro fósil, más aún si es una prueba inequívoca directa de las relaciones depredador-presa. Aquí, se presenta en una muestra única a un pequeño terópodo no aviar (
Microraptor gui) del Cretácico Temprano de la biota de Jehol, China, que tiene los restos de un ave adulta (
enantiornitino) conservados en su abdomen. Extracto vía:
www.pnas.org/content/early/2011/11/17/1117727108.abstract?sid=f18be98c