Cuando vivía con mis padres, mi gato (para el que yo era su preferido) sabía cuándo yo volvía a casa sólo con yo abrir la puerta del ascensor. A pesar de haber 5 viviendas compartiendo descansillo, y con varios habitantes por vivienda, él distinguía si era yo u otro quien abría la puerta del ascensor, y lo hacía desde el salón, a más de 15 metros de distancia de la puerta de la casa. Salía disparado a la puerta de la entrada en cuanto me detectaba. Nunca supe qué hacía yo diferente de mis vecinos, mis padres o mis hermanos para que el gato supiese que era yo quien llegaba a casa y no otro.
Mis padres también sabían que era yo quien llegaba a casa, claro. Sólo tenían que observar al gato .
Comentarios
Me jode confirmar la ley de cunningham pero se le hizo la picha un lío con los metros y los pisos, porque 32 pisos creo que no son 320 metros
#1 Pues por ahí andará
#2 No, tío, eso implicaría que un piso tiene 10 m de alto, ma o meno.
#3 Sip. Pues un rascacielos hecho para gente muy alta.
Cuando vivía con mis padres, mi gato (para el que yo era su preferido) sabía cuándo yo volvía a casa sólo con yo abrir la puerta del ascensor. A pesar de haber 5 viviendas compartiendo descansillo, y con varios habitantes por vivienda, él distinguía si era yo u otro quien abría la puerta del ascensor, y lo hacía desde el salón, a más de 15 metros de distancia de la puerta de la casa. Salía disparado a la puerta de la entrada en cuanto me detectaba. Nunca supe qué hacía yo diferente de mis vecinos, mis padres o mis hermanos para que el gato supiese que era yo quien llegaba a casa y no otro.
Mis padres también sabían que era yo quien llegaba a casa, claro. Sólo tenían que observar al gato .
51.2- Los gatos oyen la electricidad