Siempre hemos estado orgullosos de nuestra generación: esa generación que ha sido la primera en entender los ordenadores rudimentarios; la generación que aún jugaba en la calle, pero que también ha tenido una de esas Game Boy de pantalla verde y más gruesa que una Biblia; la generación que se peleaba por las canicas y los tazos. Era la generación que se desvivía por ver el siguiente capítulo de Beverly Hills y que por supuesto, veía ALF.
Comentarios
¡Alf! ¿Te acuerdas de Alf? ¡Ha vuelto! ¡Y en forma de meneo!
que fiestas que se montaba el padre de alf... ains...
La música era lo mejor de la serie.
Bueno y la hermanita mayor también ponía...
Lucky! Métete en el pan!