En estas situaciones complicadas siempre se tiende a buscar un culpable y volcarle toda la responsabilidad. Es cierto, fui el culpable. Se me acusaba de cometer un error catastrófico, la moral de Laura estaba por los suelos, lloraba en ocasiones y yo me sentía bastante mal por ello. Pero yo siempre le contaba la misma historia, estaba convencido que saldríamos más pronto que tarde de esa situación, le decía que ya se me ocurriría algo, pero ella, incrédula, no me hacía ni caso. Cómo iba a confiar en mí después de mis geniales ideas.
Comentarios
Historia demasiado larga. Pocos trozos interesantes. Cansa la gente que se cree que una historia es más interesante si poner “hackear” en el título. Es el “Como cambié mi vida por culpa de un error que cometí” de siempre con la palabra “hackear” para que parezca otra cosa.
La história es buena.
Aprender le salió caro.
Buena historia de que hacer y mas importante QUE NO HACER a la hora de emprender.
Para triunfar: resume, resume, resume.
Sí que es larga sí, pero me parece tan increible que quería compartirla. Como anécdota, hace unos meses fui invitado en un blog para escribir un artículo, y mi principal miedo es que era muy largo aquello que escribí. Mi amigo me dijo "no te preocupes por la extensión, si alguien con dolor de espalda encuentra un texto sobre cómo aliviarle, se lo leerá entero". A mí me parece BRUTAL.
No obstante #3 tienes razón, "resume" es el mejor consejo para escribir o publicar en internet, gracias.
#3 Resumen:
Un individuo jovenzuelo de 22 años e inexperto decide ser emprendedor y para ello se le ocurre montar un bar por ser algo teóricamente rápido (alquilar local, comprar producto, servir/vender producto). Tras un tiempo deja su trabajo y convence a su novia para que también lo deje, dedicándose a tiempo completo al restaurante. Convencen a sus padres para que les avalen, teniendo su madre sin ingresos que hipotecar la casa de la costa para el aval, sobre unos 150.000€ entre ambos préstamos.
Como ni tienen idea alguna de llevar un restaurante ni es algo que les guste siquiera deciden al poco tiempo (tras currar mucho y conseguir sacarlo adelante según él) malvenderlo rápidamente para quitarse de en medio algo que les estaba afectando personal y emocionalmente. Liberándose únicamente de un 10% de la deuda, se quedan sin restaurante y con una deuda de 1.000€/mes durante 16 años.
Al individuo jovenzuelo, iluminado por innumerables lemas de autoayuda de «aprovechar el fracaso», «pensar de forma diferente» y demás eslóganes de entrepeneurs con sudadera, decide apuntarse a Atrapa un Millón utilizando una estrategia de parejita simpática y graciosa que se quiere mucho y que tiene apuros económicos y una deuda que pagar. Consiguen con ese teatrillo que de la versión diaria del programa les inviten a la semanal en prime time y, finalmente, ganan alrededor de 160.000€ (entre los 10.000€ conseguidos de la versión diaria y los 150.000€ de la semanal).
Saldan la deuda y se quedan con unos 20.000€ cada uno. El individuo ya no tan jovenzuelo decide nuevamente olisquear emprendimientos y se fija en una idea americana. Inspirado en esa idea, monta junto a su novia un mercadillo online de ropa de mujer: cualquier chica se registra, pone ropa en su «armario» y puede vender esa ropa a cualquiera que quiera comprarla. Utilizan para promocionarlo y como primeras vendedoras a las bloggers de moda y le sale bien la jugada. Al final consigue financiación externa de business angels de esos que conoce en reuniones para entrepeneurs con sudadera y, según cuenta y tras mucho crecer, este año llegan a los 10 millones de ventas.
Todo ello rellenado con muchas frases de autoayuda, de «si no llego a fracasar no hubiera tenido esa oportunidad», «si te caes, levántate y vuelve a intentarlo», hacer tal cosa es de winners y hacer tal otra es de losers, y demás. Y con promoción implícita y explícita de su portal, ya de paso, no dejando de aprovechar la ocasión para anunciar que andan necesitando perfiles técnicos para contratar.
#5 Un maravilloso resumen. Estos articulos son como veneno puro. Incitan a la gente a jugarse el patrimonio de su familia con tantas posibilidades de ganar como en una mesa de Black Jack en Las Vegas.
#6 Gracias, aunque debo decir (lo único que me faltó en el resumen) que sobre lo de jugarse el patrimonio aprendió y en su siguiente negocio (el actual) insistía en que todo lo hacía gastando lo mínimo y nunca poniendo todo el dinero antes de ver si va funcionando. Incluso hubo inversores que le rechazaron —según él— por esa tacañería de gastar eficientemente.
Eso sí, debo confesar que le he cogido cierto repelús a ese tipo de eslóganes de emprendimiento que pululuan por ahí. Cuando fracasó, además de por ser joven y cometer muchos errores (dejar el trabajo, endeudarse hasta las vejas, etc.), lo hizo entre otras cosas por montar algo que no le gustaba ni le apasionaba simplemente por hacer algo para ganar dinero. Esa mentalidad de tener como primer objetivo el dinero (—Quiero ser... ¡emprendedor! —Eh.. vale, pero, ¿emprendedor de qué?) y, posteriormente, el medio a través del cual se obtendrá ese dinero, siempre me ha parecido una mentalidad envenenada a título personal independientemente de que se gestione mejor o peor y, por tanto, independientemente de que triunfe o fracase.
#6 ¿Has leído el artículo? Porque precisamente lo que aprendes del artículo es lo contrario a lo que afirmas. No entiendo la gente que opina sobre un artículo sin siquiera haberlo leído, ¿cual es el objetivo de un comentario absurdo sobre algo que no has leído? En fin hay gente para todo en este mundo. Y encima la gente te vota positivo. Meneame, welcome to trolland jaja.
El titular me ha recordado esto
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