Publicado hace 9 años por enjoyingbreathtaking a elmundotoday.com

Reconociendo que había terminado de hacer caca, Javier Falerín, un administrativo de 37 años ha declarado que “ojalá” no hubiera terminado de vaciar sus intestinos para poder seguir leyendo tranquilamente en el lavabo en su iPhone un artículo del dominical. “Conforme iba notando que no quedaba más caca he intentado ralentizar la evacuación y acelerar mi lectura, pero me ha sido imposible llegar a la meta”, ha declarado.