Los escape rooms son una excelente forma de interactuar con la literatura de otras formas distintas a la lectura. Conocedoras de ello, algunas bibliotecas han comenzado a usarlas entre sus usuarios, dando lugar a algunos ejemplos bastante curiosos. Una de esas escape rooms la iba a poner a marcha la Biblioteca Pública del Municipio de Peters en McMurray, en Pensilvania, pero la biblioteca se vio obligada a cerrar sus puertas debido a la pandemia. Sin la posibilidad de hacer la escape room en un espacio físico real (...)
Comentarios
Pues muy buena iniciativa. No la he visto en castellano en ningún lugar aún, pero tiene buena pinta para usarse en asignaturas diversas como método de incentivar la lectura y el aprendizaje.