“‘¡Oh pedisteis calor, ingratos, ignorantes, insensatos!”, ha advertido Roberto Brasero al arrancar el espacio. A continuación, según han podido comprobar millones de espectadores, se ha desnudado y, alzando los brazos, ha pedido perdón al Viejo Invierno, rogándole que vuelva. Un técnico le ha acercado una cabra que el presentador ha sujetado del cuello con los ojos en blanco y le ha clavado la daga ritual de Antena 3 en el cuello. Brasero ha repetido el gesto en 24 ocasiones más entre rezos y cánticos arcanos.
Comentarios
El ISIS ya ha sacado un comunicado mostrando su indignación
Que no se preocupe, que al invierno no se lo come el lobo.