El J.R. MORA debe ser humorista por encargo, como un sastre, hace chistes a medida de sus clientes q le dan de comer. Pero sus clientes son tan contrahechos que los trajes salen de pena
Comentarios
El J.R. MORA debe ser humorista por encargo, como un sastre, hace chistes a medida de sus clientes q le dan de comer. Pero sus clientes son tan contrahechos que los trajes salen de pena