Como se puede apreciar en la foto, es el hijoputa del niño el que tira de las orejas al perro, molestándole continuamente, y no al revés. El perro todavía no le ha tirado de las orejas al niño ni una sola vez. Lo tengo claro, si hay que echar a alguno de los dos, es al metepatas.
Iba a ir lejos el perro si le tiene pelusa a mi hijo... Lo sentiría mucho por él pero mi hijo es lo primero, sería un marrón buscarle un sitio al perro pero no me la juego lo siento por los animalistas.
Comentarios
Yo solo opino una cosa. ¿Quién estaba primero?
Lo suyo es ofrecer el bebe al perro. Si no lo devora hay posibilidades de que lo acepte en la manada.
Cada uno debe de tener su cuenco de comida, yo lo solucioné llamando al susurrador de bebés.
#1 En mi caso no sirvió de mucho, pero descubrí que dándole con un periódico enrollado en el hocico, empezó a ir a su cuenco en vez de al del perro.
Como se puede apreciar en la foto, es el hijoputa del niño el que tira de las orejas al perro, molestándole continuamente, y no al revés. El perro todavía no le ha tirado de las orejas al niño ni una sola vez. Lo tengo claro, si hay que echar a alguno de los dos, es al metepatas.
Que pruebe dandole el pecho al perro y sacando a pasear 3 veces al día al bebe.
Iba a ir lejos el perro si le tiene pelusa a mi hijo... Lo sentiría mucho por él pero mi hijo es lo primero, sería un marrón buscarle un sitio al perro pero no me la juego lo siento por los animalistas.
#5 Así crecen de sobreprotegidos... Que luchen a muerte entre ellos, solo puede quedar uno.
Está claro,
en las pijo-parejas-perrito de hoy en día, si sobra algo es el bebé.
#6 La idea que perro y bebé luchen por el comedero es muy buena, eso sí, el comedero que sea de diseño.