En fotografía, como en cualquier otro arte, no debe haber reglas de obligado cumplimiento. Sin embargo, cuando hablamos de la composición solemos abordar varios principios que todos conocemos en mayor o menor medida, y que parecen indicarnos qué camino tenemos que recorrer. Pero no es así. Conocer las leyes básicas de composición es el mejor recurso al que podemos recurrir para transgredirlas y evolucionar.