Su característico contorno es una auténtica seña de identidad, con forma de vertiginosa pirámide. Pero no sólo su forma y belleza natural han dado fama al Espigüete, también su dureza y exigencia, que atrae hasta su cima a numerosos deportistas profesionales en busca de riesgo y adrenalina.
Comentarios
Un detalle precioso que lo nombrasen como el personaje principal de barrio Sésamo.