El hombre llegó al hospital en el noreste de India el mes pasado y aseguró que había ingerido unos auriculares, relató el Dr. Walliul Islam, cirujano general del hospital. “...Vino a nosotros después de cinco días, (y) a pesar de defecar varias veces, el cable no salió..." Fue en ese momento que una radiografía reveló que el hombre tenía un cable de cargador de 60 centímetros de largo dentro su vejiga, el cual fue insertado a través de su uretra, el tubo que va desde el pene a la vejiga.
#5:
En un libro de psiquiatría que leí (no recuerdo título) describía el caso de un hombre que se insertaba varillas de cristal en la uretra, con riesgo para su vida si se rompia una. Tras el tratamiento sustituyó está práctica por la de retorcerse el escroto. El autor lo consideraba un éxito del tratamiento pues la nueva práctica no ponía en peligro su vida, a pesar de varios ingresos hospitalarios provocados por un excesivo entusiasmo en el refocile.
Contaba otro caso de un hombre que pidió a su esposa que se afeitara el púbis. La mujer escandalizada le amenazó con el divorcio si no se sometia a tratamiento psiquiátrico.
En un libro de psiquiatría que leí (no recuerdo título) describía el caso de un hombre que se insertaba varillas de cristal en la uretra, con riesgo para su vida si se rompia una. Tras el tratamiento sustituyó está práctica por la de retorcerse el escroto. El autor lo consideraba un éxito del tratamiento pues la nueva práctica no ponía en peligro su vida, a pesar de varios ingresos hospitalarios provocados por un excesivo entusiasmo en el refocile.
Contaba otro caso de un hombre que pidió a su esposa que se afeitara el púbis. La mujer escandalizada le amenazó con el divorcio si no se sometia a tratamiento psiquiátrico.
“He leído que la gente solía obtener gratificación sexual insertando instrumentos a través del pene. Este es uno de esos casos, y el psiquiatra puede ayudarlo más allá de este punto”, agregó.
Comentarios
En un libro de psiquiatría que leí (no recuerdo título) describía el caso de un hombre que se insertaba varillas de cristal en la uretra, con riesgo para su vida si se rompia una. Tras el tratamiento sustituyó está práctica por la de retorcerse el escroto. El autor lo consideraba un éxito del tratamiento pues la nueva práctica no ponía en peligro su vida, a pesar de varios ingresos hospitalarios provocados por un excesivo entusiasmo en el refocile.
Contaba otro caso de un hombre que pidió a su esposa que se afeitara el púbis. La mujer escandalizada le amenazó con el divorcio si no se sometia a tratamiento psiquiátrico.
#5 Ami me contaron de uno que se introducíanos. Otros se metían bolitas pequeñas...
#7 "uno que se introducíanos"
Tengo que preguntarlo ¿Ejo queeloquehé?
#9 gusanos, se introducía gusanos.
Los que tenemos una edad sabemos que con los cargadores nokia viejos esto se podia hacer. Pero el maldito USB lo arruinó todo.
La nueva era digital.
Una variante del sounding.
“He leído que la gente solía obtener gratificación sexual insertando instrumentos a través del pene. Este es uno de esos casos, y el psiquiatra puede ayudarlo más allá de este punto”, agregó.
jajajajaj la valoracion final es la guinda.
#1 ... porque nadie podía esperar que alguien que se introduce objetos por su uretra fuese un enfermo mental. Claro, qué final más inesperado.
Anda, madura un poco, que aún tienes que burlarte del latín meus, mea meum
Quería estar bien cargado