Hace 6 meses | Por spacemenko a cadenaser.com
Publicado hace 6 meses por spacemenko a cadenaser.com

Las luces decoran las calles. Los adornos, las tiendas y fachadas. Y el espumillón, los balcones. Llega la Navidad y parece que las calles han cambiado de escenario y son distintas. Pero también las casas, donde más allá de Papá Noel, el nacimiento o la decoración navideña, hay un árbol — lleno de guirnaldas, luces y bolas de colores — en prácticamente todos los salones de España. Se trata de una tradición cristiana con muchos siglos de antigüedad que antes fue celta, romana o, según apuntan la mayoría de expertos, vikinga.