En nuestra industria hay opiniones muy diferentes sobre la relación entre cine e internet, este fue uno de los motivos fundamentales de la dimisión de Álex de la Iglesia.Cada vez se habla más de la entrada en España de empresas especializada en distribuir cine on line (y otros contenidos) de forma legal, con gran calidad de streaming, precios asequibles y amplios catálogos, mediante descarga. En España hay dos empresas fuertes en este mercado. Filmin, especializada en cine independiente, y Filmotech.

Desde el momento en el que el cine se autoexplica hasta la saciedad, entra en el círculo vicioso de creer que el espectador es idiota y no entenderá lo que uno quiere contar, y de repente el espectador se acostumbra a que le expliquen todo y cuando no lo hacen no sabe como reaccionar. Puede que esté dando demasiadas vueltas a lo mismo, la mediocridad, el cine grande y pequeño, el espectador idiota...

En su manifiesto, recogido por Slashfilm, los directores advierten de que el nuevo modelo "dañará irreversiblemente la industria", refiriéndose a aspectos como "las salas de cine con pantallas grandes, buenos equipos de proyección y sonido y aforos grandes". Cameron, quien ya se había significado contra esta iniciativa, y sus compañeros añaden que, además de quitarles el negocio a los exhibidores, las películas sin grandes campañas promocionales quedarán marginadas frente a los grandes blockbusters.

Hace unos meses, encontré en Ballardian.com, web dedicada al universo de JG Ballard, un interesante articulo que comparaba las literaturas del recientemente fallecido escritor británico, santo de devoción en esta casa, y la del genio de Providence, HP Lovecraft. Jamás se me habría ocurrido relacionar a estos dos escritores que como mínimo tienen en común el haber sido dos de los autores más importantes del siglo XX, creadores de obras de influencia radical y universos propios.

"algunos pensaron que mi post era contradictorio porque por un lado criticaba a la ley sinde, por otro yo confesaba, sin vergüenza alguna, haber financiado parte de mi última película con una ayuda del Gobierno de Cantabria, y por otro planteaba que había que poner algún freno a las páginas que se lucraban con el intercambio de links de películas de estreno. En realidad, no son aspectos que choquen entre sí, lo que pasa es que no se corresponden con el “pack” de ideas que parece que tienes que llevar a cuestas"

Más tarde o más temprano, a algún guionista de este país le encargarán escribir una tv-movie sobre el caso de Dorel Marcu, más conocido en España como el asesino de la webcam. Probablemente la tv-movie nunca se llegue a emitir, pero casi con toda seguridad llegará a haber un guión (...) Pero Sostres hace algo aparte de trastear con la etiqueta de la violencia machista. Sostres, como haría un buen guionista, se pone en la piel del asesino e intenta comprenderlo. Y tiene el valor de mencionar algo que todos hemos pensado muchas veces.

El productor, distribuidor y exhibidor Enrique González Macho ha ganado este domingo las elecciones para presidir la Academia de Cine, imponiéndose así al cineasta Bigas Luna.

El debate está instalado desde hace mucho tiempo, pero con la crisis económica se ha calentado. ¿Tiene sentido subvencionar un cine que no es rentable? ¿No hay otros métodos de financiación privada para el cine español? Cineastas como Andrés Duque o José Luis Alemán, y proyectos de financiación colectiva como El cosmonauta, muestran cómo, tanto por la vía de la austeridad como de la superproducción, se puede intentar.

Si ayer hablábamos del unánime apoyo de la Academia a Manuel Sirgo tras declararse inocente por el presunto pirateo de películas distribuidas entre los académicos, hoy vemos vía El Mundo que uno de sus compañeros, identificado con el nick que utilizaba en el blog que daba acceso a esos contenidos como mfatroty, ha exculpado a Sirgo del delito y ha lamentado el daño que le ha causado al piratear y difundir las películas que, como la maltrecha Ispansi, fueron facilitadas a los académicos mediante un sistema de streaming bajo clave.

El cine español ha vivido su mejor fin de semana de la historia, una lluvia de millones que han llegado de la mano del estreno de Torrente 4. Lethal Crisis. La cinta ha generado unos estimados entre 8,2-8,3M€ en 665 cines (casi 910 pantallas) que lo han convertido en el mejor estreno español de la historia y el cuarto en términos generales. Ahora la producción nacional puede respirar tranquila porque el 2011 apunta a grandes resultados.

Los pilares de su propuesta consistirían en "reactivar el talento", "monetizar los nuevos soportes" -en alusión a las posibilidades comerciales de internet, un medio al que ve "más como un aliado que como un enemigo"-, explotar a fondo las posibilidades de la mercadotecnia y "despolitizar" el mundo del cine, buscando nuevos inversores que quieran obtener beneficios.

En un hotel de Madrid, cuya decoración recuerda a La naranja mecánica, película polémica en su tiempo por su escenificación de la ultraviolencia, se citan Javier Angulo y Nacho Vigalondo. El primero dirige la Semana de Cine de Valladolid (Seminci). Vigalondo es director y erudito consumidor de cine de género. Ambos conversan sobre la polémica por la imputación del director del Festival de Cine de Sitges, Ángel Sala, tras la exhibición de A Serbian Film.

Los abajo firmantes, directores de festivales cinematográficos españoles, queremos dejar constancia, ante la filtración a la prensa publicada el pasado fin de semana, de nuestra extrañeza por la actuación judicial contra Ángel Sala, director del Catalunya-Festival Internacional de Cinema de Sitges, por haber incluido en la programación 2010 del citado evento, en pases sólo aptos para adultos, la película A Serbian Film, en la que se pretende ver contenidos violentos, pornográficos y contrarios a los derechos de la infancia.

Muchas veces pienso que la salvación del cine español pasa por una campaña de publicidad diseñada por Don Draper. Sólo si el protagonista de la serie sobre el mundo publicitario Mad Men concibiese un lavado de cara para la cinematografía española habría una posibilidad de que el público dejase de odiarnos. Porque no sé si se han dado cuenta, pero gran parte de la población española abomina de su cine.

De hecho, creo -y ésta es otra peligrosa interpretación personal- que a José A. Pérez, como a media España, le han enseñado a creer que las subvenciones son el caldo de cultivo de una casta adinerada, corrupta y sin talento. Le han enseñado a creer que es injusto que el cine reciba ayudas. Le han enseñado a creer que es injusto que los autores reciban dinero por la explotación de sus obras. Y le han enseñado a creer que la gestión del dinero público en el cine es menos transparente que en otros sectores.

Digo autocrítica desde el punto de vista de miembro de la industria audiovisual española y por haber cometido similares errores a lo largo de mi carrera.¿Como es posible que se estrenen 3 películas españolas de cierta ambición el fin de semana de los Oscars? Seguro que hay motivos que se me escapan, pero considero que ha sido un grave error, sobretodo para la que yo veía con mas posibilidades de éxito, Secuestrados. Las tres se estrenaban con ambición en el numero de copias: Chico y Rita (142); Secuestrados (158) y 23F (225).

el conselleiro Varela y el presidente Feijóo, responsables últimos del entierro de esta modélica filmoteca digital, se han cargado el escaparate del cine facturado en el bonsai atlántico para ahorrarse 300 euros al mes.

Malos tiempos para el audiovisual gallego. Tras el cierre del Onda Curta, un programa de la TVG en el que se proyectaban cortometrajes de realizadores del país, le ha llegado la hora a flocos.tv, una filmoteca online gratuita que ofrecía gran parte de la producción cinematográfica de Galicia.

En el último post trataba de explicar porqué, en mi opinión, la mala imagen del “cine español” en muchos medios y entre gran parte del público potencial tiene, sobre todo, que ver con el posicionamiento político de muchos de sus profesionales.

Hollywood-España: 9 horas de diferencia horaria y 13 de vuelo. Llevamos varios años que tanto desfase y lejanía se tornan en proximidad. Los Oscar han entrado en nuestras casas, por sí mismos y por la notable presencia española. Durante las últimas dos décadas, el cine más premiado en la categoría de película de habla no inglesa ha sido el español, con nada menos que tres Oscar, por encima de Francia e Italia que históricamente han dominado dicha categoría.